Mons. D`Annibale lamentó violencia en Caleta Olivia y exhortó a renovar el diálogo


Mons. D`Annibale lamentó violencia en Caleta Olivia y exhortó a renovar el diálogo




Río Gallegos (Santa Cruz) (AICA): El obispo de Río Gallegos, monseñor Miguel Ángel D’Annibale, lamentó que “una vez más” la violencia, la falta de diálogo y el desencuentro hayan provocado un muerto y un herido grave en Caleta Olivia. En una reflexión tras el violento tiroteo de ayer entre facciones gremiales de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra) y del Sindicato Petroleros Privados, el prelado pidió utilizar las “manos para construir y no para destruir”. “Necesitamos como santacruceños tomar tiempo, reflexionar este hecho, pedir que se renueve la capacidad de dialogar una y otra vez hasta encontrar soluciones, pero no volver a elegir nunca más el camino de la violencia”, advirtió.

El obispo de Río Gallegos, monseñor Miguel Ángel D’Annibale, lamentó que “una vez más” la violencia, la falta de diálogo y el desencuentro hayan provocado un muerto y un herido grave en Caleta Olivia.

En una reflexión tras el violento tiroteo de ayer entre facciones gremiales de la Union Obrera de la Construcción de la República Argentina (Uocra) y del Sindicato Petroleros Privados, el prelado pidió utilizar las “manos para construir y no para destruir”.


“Hace muy pocos días los obispos de la Patagonia decíamos en nuestro mensaje pascual: ‘Nuestra sociedad, y cada uno de nosotros, tenemos experiencia de manos violentas, o cerradas, porque buscan acumular más y más…, o mezquinas para dar al obrero su salario, o ausentes de cariño y delicadeza de una manera especial hacia su familia, o depredadoras de la naturaleza”, recordó.


El obispo santacruceño reconoció que no imaginó que “estas palabras, que pensamos con mucha dedicación y tiempo los catorce obispos de la Patagonia, tomaran tanta realidad en nuestra provincia a pocos días del Domingo de Pascua”.


“Qué sentirá hoy la madre y el padre de quien ya no vive”, interpeló y agregó: “Cuánto dolor por una vida perdida en disputas que nunca deberían haber llegar a este extremo”.


“Necesitamos como santacruceños tomar tiempo, reflexionar este hecho, pedir que se renueve la capacidad de dialogar una y otra vez hasta encontrar soluciones, pero no volver a elegir nunca más el camino de la violencia”, advirtió.


Monseñor D’Annibale volvió a citar el mensaje pascual de los obispos patagónicos: “Jesús Resucitado nos alienta: ‘¡No tengan miedo! Aquí están mis manos: mírenlas’. Ciertamente son manos heridas, porque amaron sin límite, pero libres y abiertas para acariciar, abrazar, bendecir y abarcar a todos. ¡Que sus manos toquen y liberen las nuestras, llenándolas de su amor y compasión!”.


“Que Jesús Resucitado bendiga las manos de todos los trabajadores de Santa Cruz. Y que esas manos siempre sirvan para construir y no para destruir. Con mi bendición y en paz”, concluyó.+



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