Otra fazenda atenderá a adictos en Tucumán

La nueva fazenda (Crédito foto: La Gaceta) ver más
El Cadillal (Tucumán) (AICA): El cardenal Luis Héctor Villalba, arzobispo emérito de Tucumán, inauguró el sábado 15 de agosto las instalaciones de la Fazenda Virgen de la Merced, ubicada en la Ruta Nacional 9, a la altura del kilómetro 1314, cercana a El Cadillal. El purpurado recalcó que la droga “es un problema de toda la sociedad”, pero dejó en claro que “las autoridades son las primeras responsables en responder a este desafío”.
El cardenal Luis Héctor Villalba, arzobispo emérito de Tucumán, inauguró el sábado 15 de agosto las instalaciones de la Fazenda Virgen de la Merced, ubicada en la Ruta Nacional 9, a la altura del kilómetro 1314, cercana a El Cadillal.

El purpurado celebró una misa junto con el vicario para la Solidaridad de la arquidiócesis, monseñor José Melitón Chávez, y otros 50 sacerdotes. En la Eucaristía consideró que “la situación es grave y requiere de una acción mancomunada de toda la sociedad que pueda transformarse en política de Estado”.

“El desafío es grande. Tenemos que reconocer que la droga está instalada entre nosotros y no debemos permanecer indiferentes. Entre todos debemos generar una red social que propicie la cultura de la vida que comprenda a padres, docentes, funcionarios, medios de comunicación, instituciones religiosas y a todos los ámbitos sociales”, afirmó el arzobispo emérito durante una celebración con jóvenes que se recuperarán en este centro de rehabilitación.

En su homilía, el cardenal recalcó que la droga “es un problema de toda la sociedad”, pero dejó en claro que “las autoridades son las primeras responsables en responder a este desafío”, según consignó La Gaceta.

“Se debe concientizar a la sociedad y luchar contra el tráfico de drogas. Son deberes ineludibles”, sostuvo el purpurado en el campo de la fundación Virgen de La Merced Redentora de los Cautivos, que atenderá la fazenda.

Presencia fundadora
Para la inauguración llegó a la provincia fray Hans Stapel, uno de los fundadores de la Fazenda de la Esperanza en Brasil, y el obispo de Concepción, monseñor José María Rossi OP, promotor de la primera Fazenda de Tucumán, instalada en Monte Redondo, Aguilares. Hubo jóvenes de los grupos Esperanza Viva y sus familiares, voluntarios y gran cantidad de amigos participaron de la misa.

Fray Hans Stapel, de origen alemán, estaba acompañado de su compañero de obra, el laico consagrado Nelson Giovanelli. El predio cuenta con 30 hectáreas que se encuentra en la zona de El Saladillo, cerca de El Cadillal. Al ingresar lo primero que se lee es la frase “Paz y bien”, el usual saludo de san Francisco de Asís. Adentro hay dos casas donde viven los jóvenes durante un año, para realizar su recuperación, y una capilla. El centro tiene capacidad para 40 chicos.+

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