"Para que ningún obstáculo se interponga entre la petición de reconciliación y el perdón de Dios, de ahora en adelante concedo a todos los sacerdotes, en razón de su ministerio, la facultad de absolver a quienes hayan procurado el pecado de aborto", sostuvo el pontífice sobre esa disposición incluida en la carta apostólica "Misericordia et misera" presentada ayer en el Vaticano.
El obispo auxiliar de La Plata, monseñor Alberto Bochatey OSA, recordó que "existía el permiso para perdonar el aborto, pero no era para todos los sacerdotes".
"Quien se sienta a confesar un aborto, es alguien que está arrepentido", destacó en declaraciones a Infobae.
Monseñor Bochatey explicó que "antes era todo muy rígido, el aborto no era una posibilidad, después muchos obispos otorgaban a sacerdotes de su diócesis el permiso".
"Está generalizando, lo hace para todos, es un momento muy lindo porque es un año donde se ha estado meditando en torno a estas cuestiones. Sin dudas además es un signo muy positivo para la Iglesia", admitió Bochatey a Infobae, visiblemente en consonancia con la mirada del Santo Padre.
La doctrina no cambia
"No decimos que se puede abortar, decimos que perdonamos. El Papa quiere llevar la libertad del corazón a aquella persona que ya ha pecado", puntualizó el presbítero Gustavo Antico, de la arquidiócesis de Buenos Aires y secretario ejecutivo de la Comisión Episcopal de Apostolado Laico y Pastoral Familiar.
Tras indicar que el mensaje del Papa respecto al aborto es que "el pecador puede acercarse a pedir el perdón de Dios", explicó que "lo que dijo el Papa, en el sentido pastoral no cambia la postura de la Iglesia, que es velar por el ser humano desde las concepción. Sin embargo, invita al pecador a sanar su corazón".
"Dios perdona al pecador", sostuvo pero aclaró que "sin embargo el pecado es grave, porque atenta contra el inocente".
El padre Antico indicó que con su mensaje el Papa "invita a sanar su corazón y nos extiende la facultad de perdonar".+
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