Nacido en Gubbio, Italia, el 3 de junio de 1974, se graduó en Ingeniería de Seguridad y Protección en la Universidad La Sapienza de Roma, casado y con dos hijos, fue contratado por el Cuerpo de Gendarmería en 1995. Desde 1999 es responsable del diseño y desarrollo de la infraestructura de tecnología de redes y seguridad del Estado de la Ciudad del Vaticano y de la Seguridad Cibernética.
En 2010 fue transferido al Centro de Seguridad Operacional, avanzando gradualmente en responsabilidades y niveles correspondientes hasta alcanzar el rango de directivo en 2017 y director adjunto y comandante adjunto en 2018. A lo largo de los años, ha establecido una relación de confianza con los diversos Secretariados particulares del Santo Padre, las Autoridades Superiores de la Gobernación y la Secretaría de Estado, donde se requería competencia y profesionalidad para las investigaciones confidenciales.
Acompañó al Santo Padre en numerosos viajes apostólicos y visitas pastorales en Italia y en el mundo. También coordinó las estancias estivales de San Juan Pablo II y del papa emérito Benedicto XVI y desempeñó el cargo de Vicecomandante del Destacamento de Castel Gandolfo durante la estancia estival del papa Benedicto XVI en las Villas Pontificias. Formó parte del personal responsable de la gestión de la seguridad tecnológica durante los cónclaves de 2005 y 2013.
Delegado en diversas circunstancias por el director de los Servicios de Seguridad y Protección Civil para los encuentros con el Ayuntamiento de Roma y las distintas Fuerzas de Policía en relación con los llamados Grandes Acontecimientos, donde se espera la presencia del Santo Padre. Asistió a numerosos cursos y seminarios con las diferentes fuerzas policiales italianas e internacionales. +
Renuncia de Domenico Giani
Gauzzi Broccoletti reemplaza en el cargo al comandante Domenico Giani, quien presentó su renuncia al Santo Padre “por amor a la Iglesia y fidelidad al Sucesor de Pedro”, según informó un comunicado de la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
El pasado 2 de octubre algunos medios de comunicación publicaron una orden confidencial, firmada por el Comandante de la Gendarmería Vaticana, Dr. Domenico Giani, sobre las consecuencias de ciertas limitaciones administrativas impuestas a personal de la Santa Sede. Dicha publicación –subraya el comunicado–perjudicaba gravemente tanto la dignidad de las personas implicadas como la imagen de la Gendarmería.
Para asegurar la debida serenidad a la investigación en curso, -continúa el comunicado- coordinada por el Promotor de Justicia y realizada por el Cuerpo de Gendarmería, ya que el autor de la divulgación externa de la orden confidencial -reservada a los pertenecientes al Cuerpo de la Gendarmería y de la Guardia Pontificia Suiza- sigue siendo desconocido, y aunque el Comandante no tenga ninguna responsabilidad personal en el desarrollo de los acontecimientos, Domenico Giani presentó su dimisión al Santo Padre por amor a la Iglesia y fidelidad al Sucesor de Pedro.
El Santo Padre, al recibir la dimisión, expresó su aprecio al comandante por su gesto, expresión de libertad y sensibilidad institucional, que honra al Comandante Giani y el trabajo que realizó con humildad y discreción al servicio del Ministerio Petrino y de la Santa Sede.
El Papa recordó también los veinte años de fidelidad y lealtad incuestionables de Domenico Giani y subrayó cómo, dando un testimonio excepcional en muchas partes del mundo, el comandante Giani supo construir y garantizar en torno al pontífice una atmósfera constante de tranquilidad y seguridad.
El pasado sábado, el director de la Oficina de Prensa del Vaticano, Matteo Bruni informó que, para el Papa, la gravedad de la “difusión ilegal” de esa disposición de servicio “es comparable a un pecado mortal, porque va en detrimento de la dignidad de las personas y del principio de la presunción de inocencia”. +
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