Mons. Zanchetta llamó a revisar y repensar las estructuras diocesanas
San Ramón de la Nueva Orán (Salta) (AICA): El obispo de Orán, monseñor Gustavo Zanchetta, escribió una carta pastoral con motivo del primer aniversario de su ministerio, en el que hace un balance de lo actuado y plantea “oportuno revisar y repensar” las estructuras diocesanas en la perspectiva de conversión pastoral y renovación misionera de las comunidades. El prelado consideró fundamental decir “no” a la tendencia al aislamiento y concretamente al “grupismo” y propuso que “en todos los lugares y sectores de presencia diocesana constituyamos espacios de escucha, contención y orientación para esta realidad que nos interpela”.
Asimismo, consideró necesario “superar y cicatrizar heridas que siguen abiertas desde hace no pocos años y que separan a muchos hermanos entre sí, por lo cual a veces resulta difícil, cuando no imposible, encarar una tarea pastoral juntos. Llega el momento en que hay que dar nuevas oportunidades y no razonar sólo a partir de viejos desencuentros”.
El prelado se refirió también a otros desafíos pastorales como son “el flagelo de la droga” y la desnutrición, la explotación laboral de los niños, la trata de personas, la marginalidad, la preservación del medio ambiente…
En este sentido, pidió a todas las comunidades, a las parroquias, a los movimientos e instituciones, a los diversos grupos que conforman la Iglesia diocesana que “nos hagamos cargo de estas situaciones de dolor” y propuso que “en todos los lugares y sectores de presencia diocesana constituyamos espacios de escucha, contención y orientación para esta realidad que nos interpela”.
Monseñor Zanchetta consideró fundamental decir “no” a la tendencia al aislamiento y concretamente al “grupismo” y propuso que “en todos los lugares y sectores de presencia diocesana constituyamos espacios de escucha, contención y orientación para esta realidad que nos interpela”.
Destacó también que se está en gestación el Secretariado Diocesano para la Familia, que será un “organismo de comunión donde convergerán todos los movimientos al servicio de la pastoral familiar asumiendo los nuevos desafíos epocales en una realidad tan variada, haciendo presente a la diócesis en actitud de cercanía fraterna y acompañamiento pastoral”.
El obispo pidió “expresamente a nuestros sacerdotes, a la vida consagrada, a los diáconos permanentes y a todos los dirigentes y animadores laicos que organicen en todo el territorio de la diócesis encuentros para leer y trabajar la presente Carta Pastoral, y que luego hagan una devolución escrita al obispo a fin de ayudarme en el servicio que me fue encomendado como pastor. Al mismo tiempo les quiero agradecer por todo el esfuerzo que hacen y por su celo pastoral que es motivo de consuelo y esperanza”.
“No sólo me propongo alentarlos y animarlos; quiero decididamente acompañarlos y cuidarlos en nombre del Señor”, concluyó.+
Publicar un comentario