Presidencia Roque Sáenz Peña (Chaco) (AICA): El obispo auxiliar de San Roque de Presidencia Roque Sáenz Peña, monseñor Gustavo Alejandro Montini, presidió las celebraciones principales del triduo pascual en comunidades de El Impenetrable chaqueño. El prelado estuvo en la Misión Nueva Pompeya, el paraje La Fidelidad, en la localidad de Wichí y en Fuerte Esperanza. Entre otras actividades pastorales, el Jueves Santo realizó el lavatorio de pies a doce habitantes de la región, entre ellos personas de la comunidad aborigen Wichi.
El prelado estuvo en la Misión Nueva Pompeya y en localidades vecinas, mientras el párroco, presbítero Adolfo Koska, pudo visitar otras localidades y parajes, todas correspondientes a la amplia jurisdicción parroquial con sede en El Sauzalito, a casi 400 km de la sede diocesana.
Por la tarde, monseñor Montini celebró la misa propia del Jueves Santo. En la homilía comentó el versículo “Fortalezcan sus corazones” del mensaje del papa Francisco sobre la Cuaresma. Además, destacó la centralidad de la Eucaristía en la vida de los fieles y de la Iglesia y que se concreta en el mandamiento del amor donde Cristo lava los pies a sus apóstoles enseñándonos que todos debemos ser servidores. Seguidamente, también el prelado realizó el gesto del lavatorio de los pies a doce personas, entre ellas de la comunidad aborigen Wichi.
El Viernes Santo, el obispo permaneció en Misión Nueva Pompeya y dedicó la jornada matutina para encontrarse con los fieles e impartir el sacramento de la Reconciliación. Por la tarde se realizó, alrededor de la Plaza Central, el tradicional Viacrucis guiado por fieles de la comunidad. Seguidamente, en el templo tuvo lugar la celebración propia de ese día que incluye la lectura de la Palabra, la adoración de la Cruz y la Sagrada Comunión. El obispo predicó sobre los perjuicios que produce la indiferencia en la comunidad, como una actitud que ciega, cierra al servicio y lleva a las personas a cometer graves daños al punto de matar a Jesús, el Hijo de Dios.
El sábado por la tarde, monseñor Montini visitó el paraje La Fidelidad. Allí se reunió con los fieles y realizó una celebración en la que bendijo y entronizó una imagen de Nuestra Señora de los Dolores, patrona del lugar.
Por la noche, el obispo regresó a Misión Nueva Pompeya donde tuvo lugar la celebración de la Vigilia Pascual. En la homilía habló a los presentes de la alegría cristiana por la resurrección de Cristo e invitó a dejar resucitar a Jesús en las diferentes realidades que viven cotidianamente; destacando, también, las consecuencias negativas que se producen cuando no se deja a Dios que transforme los distintos ámbitos donde los fieles se desenvuelven.
El Domingo de Pascua, por la mañana, el obispo visitó la localidad de Wichí, donde celebró la Eucaristía. En un clima de gozo por la pascua y por la visita del obispo, tuvo lugar la celebración de la misa. Por la tarde, una segunda eucaristía se celebró en la localidad de Fuerte Esperanza. El obispo saludó a los presentes y en todas las comunidades transmitió los saludos del diocesano, monseñor Hugo Nicolás Barbaro.
Durante los días transcurridos en El Impenetrable, monseñor Montini tuvo la oportunidad de compartir la alegría de la Pascua con los consagrados de esa zona pastoral, coincidiendo con el Año de la Vida Consagrada propuesto por el papa Francisco. Desde varias décadas realizan una gran labor los Hermanos Maristas y varias congregaciones de religiosas: entre otras actividades se dedican a tareas pastorales de catequesis, animación de las comunidades, celebraciones, como también trabajos de promoción humana y servicios comunitarios, a una numerosa población aborigen de la etnia Wichi.+
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