“La decisión de la Corte Suprema de exigir a todos los estados que concedan licencias y reconozcan las uniones de personas del mismo sexo bajo la figura del ‘matrimonio’ es un trágico error que perjudica el bien común y a los más vulnerables, especialmente a los niños”, manifestó el presidente de la conferencia episcopal.
Monseñor Kurtz, arzobispo de Louisville, en Kentucky, señaló que “independientemente de lo que una estrecha mayoría de la Corte Suprema puede declarar en este momento de la historia, la naturaleza de la persona humana y el matrimonio permanecerán inalterables”.
“Al igual que el caso Roe versus Wade no resolvió la cuestión del aborto hace más de cuarenta años, Obergefell v. Hodges no resuelve la cuestión del matrimonio. Como la decisión no se basa en la verdad, hoy la Corte se equivoca de nuevo. Es profundamente inmoral e injusto que el gobierno declare que dos personas del mismo sexo pueden constituir un matrimonio”, insistió el arzobispo.
“El significado único del matrimonio –agregó el prelado- como la unión entre un hombre y una mujer se inscribe en nuestros cuerpos como varón y mujer. La protección de este significado es una dimensión crítica de la ‘ecología integral’, nos dice el papa Francisco”.
La máxima autoridad de la asamblea de obispos estadounidenses consideró que la obligatoriedad de redefinir el matrimonio en todo el país “es un trágico error que perjudica especialmente los niños”.
“La ley –añadió- tiene el deber de apoyar el derecho básico de todos los niños a ser criado, siempre que sea posible, por su madre y su padre casados y viviendo en un hogar estable”.
“Como obispos católicos, seguimos a nuestro Señor y seguiremos enseñando y actuando de acuerdo con esta verdad”, sentenció el prelado, quien animó a los católicos a seguir adelante con fe, esperanza y amor ante esta prueba.
“La fe en la verdad inmutable sobre el matrimonio, enraizada en la naturaleza inmutable del persona humana y confirmada por la revelación divina, debe prevalecer en nuestra sociedad, no sólo por su lógica, sino por su gran belleza y servicio de manifiesto para el bien común”, dijo el arzobispo.
Monseñor Kurtz hizo un llamado a todas las personas de buena voluntad a unirse y “proclamar la bondad, la verdad y la belleza del matrimonio como se ha entendido durante milenios”. También lanzó un mensaje a las autoridades: “Que en todas las posiciones de poder se respete la libertad dada por Dios para buscar, vivir y dar testimonio de la verdad”.+
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