El purpurado, creado cardenal por el papa Francisco, acompañó también a los sacerdotes que participaron de la jornada de formación permanente del clero que se realizó en la abadía de las monjas benedictinas.
En la celebración eucarística en la catedral San Rafael, los sacerdotes rafaelinos renovaron sus promesas sacerdotales y como es tradicional se bendicen los óleos que se utilizarán durante el año para los sacramentos.
Al término de la misa, el cardenal Villalba ofreció una reflexión “El laicado y la misericordia de Dios”.
En una rueda de prensa, monseñor Fernández presentó el itinerario pastoral del cardenal Villalba, quien recordó que había estado en varias oportunidades en la diócesis, cuando monseñor Jorge Casaretto era obispo de esta jurisdicción eclesiástica.
El purpurado dijo que el desafío más importante de la Iglesia en la Argentina es la evangelización.
"Evangelizar es llevar a Jesucristo. La Iglesia en la Argentina desde hace unos años viene trabajando en esta dirección… Aparecida fue sin duda otro impulso fuerte y me parece que esta antorcha la ha tomado el papa Francisco: salir a las periferias no solamente las periferias territoriales sino también existenciales, aquellos lugares o aquellas situaciones en donde quizá no hemos llegado, los pobres, los enfermos, los encarcelados", subrayó.
"Creo que es nuestra tarea en este momento como Iglesia de la Argentina, es salir de nuestras iglesias, por supuesto recibir a los que vienen, pero ir a buscar a los que no vienen, es la gran tarea. Ser una Iglesia misionera, me parece que es fundamental", sostuvo.
El cardenal Villalba destacó algunas de las riquezas de la Iglesia en Latinoamérica: "Es una Iglesia pobre en general, una Iglesia sencilla, una Iglesia cercana a la gente, fraterna, servicial… un trabajo en común".
"El Papa nos insta a que seamos humildes, a que seamos misericordiosos, a que estemos al servicio de la Iglesia y al servicio de nuestros hermanos, el cardenalato no es una dignidad, sino que es para amar más a Cristo, a la Iglesia, a la gente que nos rodea, sobre todo el tema que trató más que es la caridad, que es el distintivo de los hijos de la Iglesia... Dios quiera que podamos ser fieles a estas palabras del papa Francisco", expresó.
"Creo que la Iglesia está viviendo un momento muy rico, muy hermoso, el Papa Francisco está sin duda marcando un camino y más allá de los problemas, de las dificultades, de las cruces que son propias de nuestra vida, creo que tenemos que renovar nuestra esperanza. El Señor está con nosotros, no estamos solos, nos acompaña en la barca y aunque a veces puede parecer que está dormido. Él cuida de cada uno de nosotros, entonces renovar nuestra fe, no dudar, tener mucha esperanza y encomendarnos mucho a nuestra Madre, la Santísima Virgen, que es nuestra Patrona", concluyó.+
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