Monseñor Cavina señaló que el viaje de la delegación de AIN se realizará del 1 al 4 de abril. “Apenas el Santo Padre supo que viajaré con AIN, me llamó por teléfono para expresar su deseo de enviar un regalo a nuestros hermanos en la fe”, indicó el prelado.
Además, dijo que el Pontífice le entregó una carta donde agradece el viaje organizado por AIN, “iniciativa que expresa amistad, comunión eclesial y cercanía a tantos hermanos y hermanas, cuya situación de aflicción y de tribulación me aflige profundamente y nos invita a defender el derecho inalienable de cada persona a profesar libremente la propia fe”.
Mons. Cavina añadió que Francisco invitó a “no olvidar el drama de la persecución”, destacando como “el testimonio de fe valerosa y paciente de tantos discípulos de Cristo representa para toda la Iglesia un llamado a redescubrir la fuente fecunda del Misterio Pascual, del cual extraer energía, fuerza y luz para un humanismo nuevo”.
“La misericordia –prosigue el Papa–, nos invita a inclinarnos ante estos hermanos nuestros para secar sus lágrimas, curar sus heridas físicas y morales, para consolar sus corazones abatidos y tal vez extraviados. No se trata solo de un acto obligado de caridad, sino de un socorro al propio cuerpo, porque todos los cristianos, en virtud del mismo bautismo, son ‘uno’ en Cristo”.
Con respecto al viaje, la fundación pontificia AIN informó que la delegación se encontrará con Mons. Bashar Matti Warda, arzobispo caldeo de Erbil, con quien visitarán los centros de refugiados en el suburbio de mayoría cristiana de Ankawa, entre los que está la villa Padre Werenfried (fundador de AIN), donde 175 familias viven en 150 casas prefabricadas donadas por la fundación pontificia.
La delegación también visitará las escuelas prefabricadas donadas por la fundación pontificia que permiten seguir estudiando a unos 7 mil niños iraquíes.
Otro encuentro que tendrá la delegación será con monseñor Petros Mouche, obispo siro-católico de Mosul, que se ve obligado a vivir en Erbil junto con sus fieles tras la toma de su ciudad por el Estado Islámico.
Desde junio de 2014 hasta hoy, AIN destinó a los cristianos iraquíes más de 15,1 millones de euros. El apoyo a los cristianos iraquíes no cesó durante esta Cuaresma, durante la cual la sección italiana de la fundación pontificia promovió seis proyectos para ayudar a los 250 mil cristianos que permanecen en Irak. A esta campaña también se unieron con generosos donativos las diócesis de Carpi y de Ventimiglia-San Remo.
Por su parte Alessandro Monteduro, director de AIN en Italia, recordó que la fundación pontificia sostuvo a los cristianos iraquíes desde el primer momento de la persecución del Estado Islámico (ISIS); donándoles alimentos, casas y escuelas “para que puedan vivir dignamente. Sin olvidar el sostenimiento pastoral, para que así los cristianos puedan continuar viviendo plenamente su fe. Una fe a la cual valerosamente no han querido nunca renunciar, incluso a costo de sus vidas”.+
Publicar un comentario