“El Evangelio de la Familia: alegría para el mundo”, tema del EMF Dublín 2018
El cardenal Farrell hizo hincapié en que la preparación del Encuentro, es tan importante en todas las diócesis y parroquias como lo será la celebración final en Irlanda, ya que “puede incidir realmente en la vida familiar, eclesial, cultural y social, mostrando visiblemente la intensa comunión de todo el Pueblo de Dios y de todas las familias cristianas en torno al Papa”.
En referencia a la Carta del Santo Padre, el purpurado señaló que “es fácil ver la compenetración entre evangelio, familia y mundo de hoy: la familia saca fuerzas y alegría del Evangelio, la familia evangelizada hace llegar al mundo vez la buenas nueva del amor misericordioso del Padre”.
Por último el prefecto del dicasterio para los Laicos, la Familia y la Vida manifestó su esperanza de que “en Dublín el plan de Dios sobre la familia puede manifestarse en el mundo de hoy como lo que realmente es: un gran ‘sí’ a toda la creación y al corazón de la misma, que es el hombre”.
Por su parte el arzobispo de Dublin, monseñor Diarmuid Martin señaló que en la Carta de Convocatoria del Encuentro Mundial de las Familias que se publica hoy, Francisco explica como sueña la Iglesia: “Sueño con una Iglesia en salida, no autorreferente, una Iglesia que no pase lejos de las heridas del hombre, una Iglesia misericordiosa que anuncie el corazón de la revelación de Dios Amor que es la Misericordia”.
El arzobispo irlandés explicó que si bien Francisco expresó estas ideas en muchas otras ocasiones, la novedad de la Carta de Convocatoria –señaló monseñor Martin- “es el énfasis en el papel central que la familia está llamada a desempeñar en la realización de este gran sueño de renovación del Papa”.
“La familia está llamada a ser el lugar de encuentro con esa misericordia divina que sana y libera. La familia está llamada a ser el lugar donde los cónyuges se aman de una forma no vagamente romántica, sino dentro de las realidades y dificultades diarias. Vivir el amor en la familia implica que sus miembros sepan cómo darse con generosidad, sepan perdonar, sepan cómo no perder nunca la paciencia, sino, al contrario, cómo tender la mano y comprender al otro respetándose mutuamente”.
“El Encuentro Mundial de las Familias en Dublín, añadió más adelante el arzobispo, no pretende ser sólo un acontecimiento de paso, una celebración fugaz de los ideales de la vida familiar. Se trata, en cambio, de un momento en que toda la Iglesia está llamada a profundizar la reflexión sobre la enseñanza de la Amoris Laetitia; un momento en que el amor cotidiano de maridos y mujeres y el amor cotidiano de los padres por sus hijos pueda ser reconocido como un recurso fundamental para la renovación de la Iglesia y de la sociedad”.
Monseñor Martin indicó a continuación que la celebración de Dublín en agosto de 2018 estará precedida de una amplia catequesis sobre el significado del amor conyugal y familiar y sobre el papel de la familia en la sociedad. “Será un tiempo de renovación para la Iglesia en Irlanda con una amplia participación de los fieles laicos. Será un momento en que el papel de la familia se podrá entender más profundamente. Será una ocasión en la que las familias podrán recobrar la confianza en la realización de su misión en el contexto de una Iglesia que es misericordiosa, y que las acompaña en los altibajos de sus vidas”, expresó.
El encuentro en Dublín contará con tres grandes actos, un congreso de tres días, el encuentro de las familias y la misa del sábado por la noche.+
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