El papa Francisco volvió a sorprender y se comunicó telefónicamente, para dejar un mensaje, a las 600 personas que participaban del Tercer Encuentro de Catequistas de la diócesis de San Justo, que se realizó el pasado sábado con el lema “Que mi voz sea tu vos”.
En un momento del encuentro, el obispo de San Justo, monseñor Eduardo García, quien estaba en Roma, saludó a los catequistas y les dijo que alguien más quería hablar con ellos. Fue entonces, que se escuchó la voz inconfundible del pontífice argentino.
“Les mando un gran saludo. Sigan trabajando que la catequesis vale la pena, los chicos valen la pena. Hay que sembrar desde abajo”, aseguró.
“No dejen de rezar por cada uno de los chicos, ese es el secreto. Quiéranlos mucho y den el ejemplo”, sostuvo, y agregó: “Recen por mí, que lo necesito”.
Monseñor García es un hombre cercano a Jorge Bergoglio, dado que fue su obispo auxiliar en Buenos Aires y a quien confió el gobierno pastoral de la populosa y obrera diócesis de San Justo.+
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