Bajo el lema “El Papa de la paz en el Egipto de la paz”, el pontífice realizará una visita apostólica de dos días para fortalecer el diálogo interreligioso y al mismo tiempo rendir homenaje a los cristianos coptos, víctimas de numerosos atentados en ese país.
Los atentados son “un ataque al diálogo, a la paz”, reconoció monseñor Becciu que acompañará al Papa a Egipto. El sustituto de la Secretaría de Estado considera también que los atentados son “un mensaje indirecto al gobierno de ese país y contra la minoría cristiana, que obtuvo en los últimos tiempos más libertades”, estimó.
“Egipto nos garantizó que todo saldrá bien, viajamos tranquilos”, añadió. Por motivos de seguridad, en el programa del Papa en Egipto durante los dos días no se especifica el lugar de las reuniones, aunque sí se sabe que se encontrará con el presidente Abdel Fattah al Sisi, con el gran imán de la mezquita Al Azhar, Ahmed el Tayeb, y con el Patriarca de los cristianos coptos, Tawadros II.
Francisco, que siempre se manifestó a favor del diálogo con las otras religiones, se niega a asociar el islam con “el terrorismo”, recordó monseñor Becciu, quien fue por años nuncio en África. Cerca del 10% de los 92 millones de egipcios pertenecen a la comunidad copta, en un país en el que los musulmanes sunitas representan la inmensa mayoría.
Los dos atentados del domingo fueron reivindicados por el grupo yihadista Estado Islámico (EI) y son considerados entre los más sangrientos ataques de los últimos años contra la minoría cristiana de este país. El hecho de que los ataques hayan sido programados al comienzo de la Semana Santa y a tres semanas del viaje de Francisco genera preocupación, por lo que las medidas de seguridad fueron reforzadas.
El Santo Padre, inmediatamente después de conocer la noticia, pidió durante el rezo del Ángelus este domingo “que el Señor convierta los corazones de los hombres que siembran terror, violencia y muerte; que convierta también el corazón de aquellos que fabrican y trafican con armas”. +
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