La diócesis de San Luis renovará su consagración al Sagrado Corazón de Jesús
Ayer, jueves 22 de junio, el obispo celebró las primeras vísperas de la solemnidad del Sagrado Corazón de Jesús, en la parroquia de Villa Mercedes. “Cada vez que estamos estancados, sin poder salir del pecado, vayamos al corazón de Jesús, como niño pequeño a sus brazos a descansar”, invitó en su homilía. “El que no se hace como niño no entra al reino de los cielos. Ese es el modo de vida que tenemos que llevar”, afirmó el prelado.
“El corazón de Jesús es el refugio seguro”, destacó y explicó que el agobio y la aflicción que debemos depositar en el Señor no son solo el físico, sino también el interior, “el que muchas veces es fruto de nuestros pecados, de nuestras contradicciones”. Por eso, pidió que confiados al Sagrado Corazón “ofrezcamos nuestra vida y nuestra oración de intercesión por la conversión de los pecadores”. “Interceder orando es responsabilidad de todos”, concluyó el obispo.
El martes 27 de junio, 25º aniversario de la ordenación episcopal de Jorge Bergoglio, presidirá una misa solemne a las 19, en la catedral, y el 29 de junio, solemnidad de los apóstoles Pedro y Pablo, en el marco del Día del Pontífice, el obispo de San Luis celebrará ese día, una misa por el Papa, a las 19, en la catedral.
Oración de renovación de la consagración de la diócesis de San Luis al Sagrado Corazón de Jesús
Todos: Señor Jesús, Hijo de Dios y Redentor de los hombres, postrados delante de tu altar humildemente te suplicamos que nos mires con ojos de misericordia. Te agradecemos la oración que hiciste por nosotros en las vísperas de tu pasión ante Dios Padre para que nos guardara y protegiera.
Arrepentidos sinceramente de nuestros pecados e infidelidades venimos a tus pies para pedir tu perdón y prometer reparar nuestras faltas que ingratamente han ofendido al amor de tu Sacratísimo Corazón. Tú bien sabes que somos débiles y pobres. Sólo tú, Sagrado Corazón de Jesús, eres socorro de nuestra miseria, luz para nuestros ojos, báculo para nuestros pasos, remedio de los males y bálsamo para nuestras heridas.
Obispo: Señor mío Jesucristo, como obispo de la diócesis de San Luis junto con los fieles a mí
encomendados, renuevo la consagración de la diócesis de San Luis a tu Sagrado Corazón por medio del Inmaculado Corazón de María y del ángel de San Luis. Por ello, renovamos las promesas de nuestro bautismo, es decir: renunciamos a Satanás, a sus seducciones y a sus obras.
Todos: Nos comprometemos especialmente, según nuestros medios, a reparar nuestros pecados, procurar tu gloria y trabajar para el reinado del Corazón de Jesús tanto en la vida privada como en la sociedad.
Señor Jesucristo, Hijo de Dios vivo, escribe nuestros nombres y el de la diócesis de San Luis en tu Sacratísimo Corazón. Y ya que somos todos tuyos guárdanos y defiéndenos de las asechanzas del demonio y del espíritu de este mundo. Corazón de Jesús nosotros cuidaremos de tu honra y de tus cosas y tú cuida de nosotros y de nuestras cosas.
Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío.+
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