Los templos afectados se encuentran en 11 estados de México: Chiapas, Ciudad de México, Estado de México, Guerrero, Hidalgo, Morelos, Oaxaca, Puebla, Tabasco, Tlaxcala y Veracruz.
Luego de cuatro meses de trabajo colaborativo e intercambio de información, tanto de las diócesis afectadas, como de diferentes órganos del gobierno, y a través del Observatorio Nacional, fue posible presentar el Informe de Templos Católicos dañados en septiembre de 2017.
El trabajo tiene dos propósitos, señaló la CEM: El primero, brindar información del número de los templos, también entendidos como inmuebles históricos y no históricos de la Iglesia católica en México, que sufrieron algún nivel de daño a causa de los fenómenos naturales mencionados. Y el segundo, suscitar la reflexión en torno a la importancia de los templos en la vida de los mexicanos y las repercusiones que conlleva su daño o destrucción.
Para cumplir con estos objetivos fue necesario construir una metodología para la recolección de datos que resultara coherente con los fines perseguidos, que incorporó entrevistas, e inspección de inventarios existentes tanto de la Iglesia como de otras instituciones (anuarios estadísticos, compendio de datos por diócesis, entre otros).
A través de un cuadro estadístico se llevó a cabo la cuantificación y catalogación de los templos dañados.
Resultados
Hasta enero de 2018, se lograron contabilizar 1850 templos católicos dañados, entendiendo por ello, los siguientes ocho tipos de inmuebles: catedral, basílica, parroquia o iglesia, santuario, capilla, convento, ex convento, espacios de formación como seminario, oficinas parroquiales, casas parroquiales. La segmentación deriva de las necesidades y del uso que la comunidad de fieles y pastores llevan a cabo en dichos espacios físicos.
Estos templos dañados afectaron a 26 de las 95 Diócesis, lo que representa un 27%: Las arquidiócesis de Puebla, Antequera Oaxaca, México, Tuxtla Gutiérrez, Xalapa; las diócesis de Cuernavaca, Huajuapan de León, Tlaxcala, Tabasco, Tenancingo, Tehuantepec, Chilpancingo-Chilapa, Tehuacán, Toluca, Valle de Chalco, Tlapa, San Cristóbal de las Casas, Texcoco, Ecatepec, Orizaba, Tapachula, Córdova, Tabasco, Veracruz, Nezahualcoyotl y la prelatura de Mixes.
En consecuencia, hubo daños en siete de las 18 provincias eclesiásticas que integran México, es decir el 38%. Estas provincias son: Tlanepantla, Puebla, Acapulco, Antequera Oaxaca, Tuxtla Gutiérrez, México, Yucatán y Xalapa.
Con los datos obtenidos se contabilizó daño a 17 catedrales; 4 basílicas; 44 santuarios; 76 conventos y ex conventos; 226 capillas; 31 oficinas o casas parroquiales; 11 espacios de formación como seminarios; 1.411 parroquias y 30 inmuebles en proceso de identificación.
Con ayuda del catálogo del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), que por intervención de la Secretaría de Cultura, fue compartido en octubre de 2017, se identificaron 1603 inmuebles históricos de carácter religioso dañados en once estados del país, estos son: Chiapas, Ciudad de México, Estado de México, Guerrero, Hidalgo, Morelos, Oaxaca, Puebla, Tabasco, Tlaxcala y Veracruz.+
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