En la Terminal A del aeropuerto internacional de Ezeiza, cientos de fieles aguardaron la llegada de la imagen mariana, con cantos y aplausos. Luego Nuestra Señora de Fátima fue trasladada en andas hasta el salón Malvinas Argentinas, de la Terminal C, donde se celebró la misa de bienvenida, presidida por monseñor Jorge Torres Carbonell, obispo auxiliar de Lomas de Zamora, acompañado por varios sacerdotes concelebrantes.
En la homilía, el prelado lomense hizo mención al video que el papa Francisco envió a los argentinos, un mensaje que va al corazón de la misión: “La Virgen que nos trae a Jesús”, dijo el pontífice.
“Eso es lo que en nuestro corazón descubrimos, reconocemos y necesitamos siempre, sobre todo este tiempo de Cuaresma”, expresó monseñor Torres Carbonell, y agregó: “Al mirar el mensaje de misericordia, que significa inclinarnos ante toda miseria humana, recodamos esta es la actitud principal del cristiano”.
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Luego afirmó que “el amor de la Virgen siempre nos ayuda a vivir mejor nuestro encuentro con Jesús”, ya que “ella colabora en la prolongación de la ofrenda de la vida de Jesús en un momento clave”. De este modo, pidió a la Virgen de Fátima “que nuestra vida también sea ofrenda, expresada con gestos de misericordia”.
Retomando las palabras del Papa, el obispo recordó: “Hagan lo que Jesús les diga”, dijo María. “Y en esta Cuaresma, la invitación es a ser misericordiosos”, afirmó monseñor Torres Carbonell.
“La Virgen nos ayuda a entrar y con sus presencia sola habla”, dijo al recordar a las personas que se encuentran una imagen en la calle, “la toca, toma gracia, y sigue”, manifestó, porque la gente “vive el encuentro con la Virgen”.
“Las cosas de Dios son así: Él se ha querido prolongar de esta manera, regalándonos la imagen de la Virgen”, sostuvo al destacar la importancia de la visita de la Virgen en tiempo de Cuaresma.
Al concluir, el obispo agradeció el esfuerzo de los laicos misioneros que la llevaron adelante la Misión Fátima Argentina y pidió a la Virgen “que nos ayude a llevarla donde haga falta, que nos oriente y marque los pasos”.
Antes de finalizar la misa, monseñor Torres Carbonell invitó a los presentes a rezar la oración de consagración a Nuestra Señora de Fátima.
La imagen continuará su peregrinar en la parroquia Nuestra Señora de Fátima de Temperley, diócesis de Lomas de Zamora, donde habrá una adoración eucarística, consagración de jóvenes, y misa hacia el final de la tarde.
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El itinerario
El miércoles 3 de abril la visita que comenzará en la diócesis de Azul, donde la Virgen permanecerá hasta el 14 de abril. Luego, visitará la arquidiócesis de Mercedes–Luján entre el 15 y el 28 de abril. A continuación, viajará a la diócesis de Chascomús desde el 29 de abril hasta el 6 de mayo.
La peregrinación de la Virgen de Fátima continuará en la diócesis de Morón, entre el 7 y el 11 de mayo. Del 12 al 17 de mayo la espera la diócesis de Mar del Plata para celebrar el día 13, el aniversario de su primera aparición.
Continuará su camino, en la diócesis de Gregorio de Laferrere, los días 18 y 19 de mayo, y luego visitará San Nicolás de los Arroyos, del 20 al 25 de mayo. Terminará el mes de mayo en la arquidiócesis de La Plata, entre el 26 de mayo y el 1 de junio.+
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