La jornada contó con la presencia del vicario general, presbítero Luis Albóniga, por la mañana, y del obispo diocesano, monseñor Gabriel Mestre, por la tarde, y tuvo como objetivo continuar transitando el itinerario sinodal iniciado en 2018.
La asamblea comenzó con un momento de oración, centrado en el llamado y el encuentro de los discípulos con Jesucristo, invitando a los presentes a hacer memoria agradecida del don recibido y de aquellos que, a lo largo de nuestra historia vocacional, fueron instrumentos del Señor para llevarnos a Él.
Luego de un desayuno preparado por las carmelitas, en el que los presentes tuvieron la oportunidad de compartir fraternalmente, se presentaron los resultados de las consultas abiertas e internas y las conclusiones de las asambleas eclesiales.
Finalizado ese momento, se brindó la posibilidad de realizar comentarios para hacer resonar impresiones, inquietudes y problemáticas surgidas a partir de la presentación de los informes.
Seguidamente, el presbítero Albóniga iluminó a través de una charla sobre “Elementos para un discernimiento eclesial”, a fin de brindar las pistas necesarias para elegir posteriormente los tres temas a ser tratados en la celebración del Sínodo, el próximo año.
Después del trabajo grupal, en horas del mediodía, celebraron la Eucaristía y compartieron el almuerzo fraterno para luego regresar a sus comunidades.
La hermana Mónica Gallardo, de las Hijas de María Santísima del Huerto, expresó: “Damos gracias a Dios Padre por sentirnos parte de este camino sinodal y por darle a la vida consagrada de la diócesis, la oportunidad de expresarse y realizar su aporte particular para seguir caminando juntos en la audacia del Espíritu”.+
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