Tedeum ecuménico: Piden perdón a Dios por las graves heridas causadas en Chiquitania.
La celebración, tuvo un carácter penitencial pidiendo perdón “al Dios de la vida y la creación por las graves heridas causadas a la naturaleza, la biodiversidad y a la población de Chiquitania”.
“Imploramos la misericordia divina –oró monseñor Gualberti- para que Cristo Redentor toque nuestros corazones y nos convierte en guardianes celosos de su Creación, don de su amor”.
“Este año celebramos nuestras efemérides en un momento difícil por nuestro departamento y nuestra ciudad: por un lado, el clima de incertidumbre y tensión por la campaña electoral y por el otro, “la creación entera gime hasta el presente y sufre dolores de parto” a causa de los incendios en la Chiquitania. Sufrimos y oramos por la pérdida de vidas humanas, los pueblos indígenas que han perdido todo, las heridas a nuestra casa común, la contaminación del aire y el agua y la devastación de varias especies de la flora y la fauna, dijo el arzobispo al iniciar su homilía.
Monseñor Gualberti destacó que “este desastre despertó el interés y sensibilidad por la ecología en la gran mayoría de nuestro pueblo junto al deseo y voluntad de trabajar por el cuidado de la “hermana madre tierra”, pero, añadió, “no faltan las sombras de los que, anteponen sus intereses económicos o políticos al cuidado de la casa común y al respeto de los derechos de los pueblos indígenas”.
Ante esto, exhortó a “cargar la cruz de la sangre de Cristo, del amor entregado, que nos compromete a sacrificar los intereses personales y egoístas, y a unir nuestros esfuerzos por vivir los valores y virtudes que nos unen. Hagamos realidad el proyecto de Santa Cruz, la “casa construida sobre la roca” del bien común y del sagrado respeto por la “hermana madre tierra”, y de los valores perennes de la verdad, la solidaridad, la justicia y la libertad, donde todos los hijos de esta tierra bendita vivamos como hermanos en seguridad, armonía y paz, señaló.
Durante la celebración del tedeum se vivió un momento muy emotivo, cuando se ofreció el trabajo voluntario y sacrificado de los operarios que están dando hasta su propia vida para apagar los incendios, los bomberos voluntarios ingresaron hasta el altar de la catedral llevando plantines propios de la Chiquitania y moños negros en las banderas como señal de luto por la muerte de su compañeros.
Al final de la celebración, el arzobispo de Santa Cruz de la Sierra comentó a la prensa nacional boliviana lo que significa el Mes Misionero Extraordinario, a partir de la realidad boliviana de Santa Cruz: “En Bolivia tenemos el gran desafío de ser realmente una Iglesia misionera. Una Iglesia misionera, en misión, para la misión, obviamente no hay misioneros ad gentes, pero en Bolivia necesitamos misioneros en nuestros suburbios y en el campo, porque los sacerdotes a menudo son necesarios, y son necesarios porque estamos en un mundo que se descristianiza demasiado rápido, por eso cada bautizado debe darse cuenta de que con el bautismo es un misionero! No solo los sacerdotes y religiosos son misioneros, sino que toda persona bautizada es misionera. Si ha recibido este regalo, no puede ser egoísta y tenerlo para sí mismo, porque si es un regalo de fe hay que compartirlo!” +
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