Durante la ceremonia el joven recibirá la sagrada ordenación mediante la imposición de manos del obispo diocesano, monseñor Ariel Torrado Mosconi. Con este gesto se convertirá en diácono (servidor), un ministerio intermedio antes de la ordenación al sacerdocio.
El diácono tiene entre sus funciones: predicar, anunciar el Evangelio y asistir en el altar; bautizar; distribuir la comunión y presidir la celebración del matrimonio. Además, lleva la eucaristía a los enfermos en peligro de muerte, aunque no administra el sacramento de la reconciliación ni de la unción de los enfermos.
Rodrigo Álvarez es oriundo de la localidad bonaerense de Lincoln. Allí realizó sus estudios secundarios en la Escuela de Alba. En 2011 ingresó al seminario Santo Cura de Ars, de la arquidiócesis de Mercedes-Luján, donde estudian los seminaristas de la diócesis de Nueve de Julio. Allí cursó ocho años de estudios de filosofía y teología.
Hasta entonces desempeñó sus tareas pastorales en la comunidad parroquial de Roberts, partido de Lincoln.
Durante la misma celebración el seminarista Ignacio Balle, oriundo de Nueve de Julio, será instituido acólito. Su función será prestar servicio en el altar al sacerdote. Tendrá las funciones de distribuir la comunión cuando faltan los ministros por algún motivo o cuando el número de los comulgantes sea demasiado elevado; en circunstancias especiales podrá exponer y reservar el Santísimo Sacramento, aunque aún no podrá dar la bendición eucarística. Asimismo, podrá formar y adiestrar a monaguillos y otras personas que ayudan en el servicio del altar.+
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