Mons. Dus: Cómo vivir la vocación aportando lo mejor de nosotros
Al comenzar, definió a la figura del Buen Pastor como esa que “pega fuerte”, haciendo referencia a la necesidad del hombre de “sentir esa presencia del Pastor que nos acompaña”. Recordando las expresiones del salmo 22, monseñor Dus mencionó al pastor que “nos acompaña por las oscuras quebradas”, y lo comparó con la realidad actual: “Es un tramo del camino que hoy nos toca vivir y es una imagen metafórica que nos pone en las situaciones más complicadas, cuando el camino se hace difícil, con desafíos y obstáculos”.
El arzobispo chaqueño señaló que “cuando nuestra vida es acechada, las personas de fe buscamos esa seguridad que sabemos que solamente nos da Dios. Este Buen Pastor es la presencia de Dios que está ahí, acompañando para no nos dejemos envolver por la desesperación, sino que nos invita a la esperanza”.
Entonces, mencionó que cuando “el entusiasmo, la motivación y la alegría fluyen”, todo es más sencillo, pero cuando no están, debemos fijar nuestra mirada en Él. “Qué bueno es que sepamos descubrir en el Buen Pastor un corazón grande que escucha y que sabe acompañar, sobre todo, en los tramos más duros del camino”, animó monseñor Dus, y deseó “qué esta certeza y experiencia de fe no nos falte nunca porque es lo que nos mantiene fuertes, saber que Él está a pesar de todo”.
Más adelante el prelado se refirió a la jornada de las vocaciones que celebra la Iglesia en este domingo, y expresó: “Las que se van suscitando en medio de la adversidad, son genuinas cuando podemos entender qué es lo que Dios quiere de nosotros”. En este sentido, explicó cómo la vocación “se va fraguando”, haciendo fuerte y consolidando, “en los tiempos más difíciles. Porque cuando la cosa va bien, todo es más sencillo”.
Monseñor Dus invitó a la comunidad chaqueña a pensar cada uno en su vocación personal y “cómo vivirla aportando lo mejor de nosotros en este tiempo difícil, con apertura. Es un momento para creer en nuestra dimensión vocacional”, aseguró, y resaltó que “desde la fe y con apertura, el Señor nos permite ver si podemos ofrecer mas, servir y crecer en nuestras vocaciones”, por eso, animó: “No dejemos pasar esta oportunidad”.
Haciendo mención a las vocaciones sacerdotales, llamó a los jóvenes a discernir “con claridad lo que implica el servicio y la entrega en situaciones difíciles y de riesgo. Salgamos de la idea romántica de la vocación y pensémosla como el servicio en medio de las adversidades”. Y afirmó: “El joven que ha despertado auténticamente su vocación, se la juega a fondo por Jesús y por la vocación”.
Al concluir, monseñor Dus pidió a María que envíe vocaciones para la Iglesia y para la diócesis de Resistencia, e invitó a la comunidad a rezar la oración del Año Mariano Nacional. +
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