A tres años de su beatificación, los santiagueños honraron a Mama Antula con una peregrinación
La actividad llevó el lema “Mama Antula y Brochero, modelos de santidad para nuestro tiempo” y se desarrolló el 24 de agosto con la presencia de más de mil fieles que se dirigieron desde la parroquia Nuestro Señor del Mailín, de la capital santiagueña, a la capilla dedicada a la beata en la localidad de Villa Silípica.
La peregrinación se llevó a cabo en un clima de “mucha alegría, mucho gozo”, describió el presbítero Mario Tenti, y destacó que el clima especial se comenzó a vivir desde días previos a la peregrinación con la visita de la imagen de Mama Antula a las comunidades, el recibimiento en cada una de las capillas, el clima de fe y de oración con que la esperaban, que fue marcando lo que iba a ser la peregrinación.
“Nos hemos visto sorprendidos, ya que si bien esperábamos más gente que el año pasado, han participado entre 1.100 y 1.200 personas, sin contar gente que ha venido desde Loreto con el padre Alejandro, unas 300 personas, y la que estaba en el santuario cuando llegamos con la peregrinación para celebrar la misa”, detalló el sacerdote.
En ese sentido, aclaró que la importancia no fue tanto por el número, sino por “el clima, el modo en cómo se ha vivido esta celebración, la alegría, el canto, la ayuda solidaria por el camino”.
“Estamos muy agradecidos con todos los organismos del Estado que han colaborado, desde la Policía, de Recursos Hídricos, Vialidad, la Dirección General de Energía de la provincia, los organismos que se han sumado con buena voluntad; al gobernador de la provincia que siempre nos apoya, a la Subsecretaría de Turismo que es con la que tenemos un convenio de reciprocidad, de trabajo conjunto para desarrollar el turismo religioso por el Camino Real”, reconoció.
También hizo llegar su gratitud al obispado de Santiago del Estero, a las capillas, y a los efectivos de Gendarmería y de la Escuela de Policía.
Sobre el lema de esta festividad, Tenti aseguró: “Hemos querido señalar esta línea de espiritualidad que el pueblo santiagueño vive desde la religiosidad, y que estas figuras emblemáticas de Brochero y Mama Antula pueden ayudarnos a profundizar la fe y un mayor compromiso con la sociedad, que es lo que se espera de los cristianos”.
La primera parada fue en la capilla de San Pedro, donde se realizó un almuerzo comunitario, un show de folclore y controles de salud. A su arribo en Villa Silípica, los fieles participaron de la celebración de la misa presidida por el presbítero Tenti.+
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