El tema de esta décima edición es “Cuidar nuestro futuro común” y entre los objetivos se destaca construir un consenso moral sobre los desafíos contemporáneos, elegir un nuevo Consejo Mundial y promover acciones conjuntas multirreligiosas entre los líderes religiosos, apoyarla en países oprimidos por la violencia y el conflicto, así como apoyar el inicio de procesos de paz a través de la iniciativa multirreligiosa en la República Democrática del Congo, Sudán del Sur, Corea del Norte, Corea del Sur y Myanmar.
El presidente federal de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, inauguró la Asamblea y condenó los crímenes por razones religiosas. Mientras que –también en la apertura- el cardenal Reinhard Marx, presidente del episcopado alemán, pidió no convertir a la religión en “ideología estatal o cultural”, sino preservarla como fuerza “para la apertura y la solidaridad, para el diálogo y la cooperación, para así servir a la paz”.
En su intervención, el también arzobispo de Munich y Frisinga recordó a los asistentes que las religiones tienen un “significado especial” en el contexto mundial actual y en un mundo globalizado las religiones han de orientarse hacia la construcción de la paz, “para que las oportunidades globales se puedan poner al servicio del bien de toda la familia humana”, señaló el cardenal alemán.
Participan del Encuentro, entre otras personalidades, el expresidente y exprimer ministro de Timor Oriental José Ramos-Horta, quien compartió el Premio Nobel de la Paz con su compatriota, el obispo Carlos Felipe Ximenes Belo, en 1996; Miguel Ángel Moratinos Cuyaubé, exministro español de Exteriores y exrepresentante de la Unión Europea para el proceso de paz árabe-israelí; el cardenal John Onaiyekan, quien juega un papel conciliador entre las religiones de Nigeria a pesar del terrorismo separatista de Boko Haram, y la activista Layla Alkhafaji, líder de la lucha contra la violencia de género en su Irak natal tras haber pasado diez años en la cárcel.
Nuevas autoridades del Consejo Latinoamericano de Líderes Religiosos
En el contexto de la Asamblea Mundial de Religiones por la Paz, el Consejo Latinoamericano de Líderes Religiosos se reunió y renovó su comité ejecutivo.
El cardenal Raymundo Damasceno Assis, obispo emérito de Aparecida, fue elegido moderador y formará parte del Consejo a título personal, después de haber representado al Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam) hasta este año.
Los vicemoderadores serán Muhammad Yusuf Hallar, de la Organización Islámica para América Latina y el Caribe (Oipalc) y Claudio Epelman, del Congreso Judío Latinoamericano (CJL).
Monseñor Miguel Cabrejos Vidarte, arzobispo de Trujillo (Perú) y presidente del Celam, será el portavoz. Elías Szczytnicki será el secretario general.
El Consejo Latinoamericano de Líderes Religiosos tiene como objetivo promover las iniciativas de trabajo conjunto de Religiones por la Paz en el subcontinente, en armonía con las decisiones de la Asamblea Mundial.
Religiones por la Paz
“Religiones por la Paz” fue establecida en la primera asamblea mundial en 1970 y hoy cuenta con 90 asociaciones nacionales miembros. Consiste en una red de líderes religiosos, que se organiza a nivel global, regional y local, para apelar a la política de paz y la responsabilidad social.
Para lograr este objetivo coopera con gobiernos y organizaciones internacionales (como la Unesco, la Unicef o la Ocde). Desde 1973, “Religiones por la Paz” es una ONG acreditada en las Naciones Unidas en Nueva York, donde se encuentra la oficina central, situada justo enfrente de la sede de la ONU.
Desde 1970, cada 5 años se organiza una reunión mundial, junto con los líderes religiosos de todo el mundo y todas las religiones relevantes. +
Publicar un comentario