Si bien los religiosos no hicieron declaraciones oficiales sobre la propuesta de “resignificación” del Valle de los Caídos, vinculada con la exhumación de los restos de Francisco Franco y ampliada a la propuesta de demoler la Cruz monumental e incluso retirar la abadía y la basílica, la homilía del prior de la abadía, padre Santiago Cantera, en la fiesta de la Exaltación de la Santa Cruz fue interpretada por los medios de comunicación como una fuerte crítica a la iniciativa.
“El demonio, Satanás, se valió de un árbol para sembrar en el mundo de nuestros primeros padres el pecado, la discordia y la desunión”, dijo el Prior. “Cuando una sociedad se aparta de Cristo, solo puede caber lo que estamos viviendo: el odio, la ambición, la mentira, la falsedad, la revancha, la venganza. El odio es un gusano que corroe”. El sacerdote destacó el carácter sagrado de la Abadía y el fervor de los fieles que la visitan por su significado religioso. “Todo esto confirma cómo el Valle de los Caídos, una vez más y todavía más, es un verdadero lugar de culto y un Santuario que cuando es atacado es aún más querido y más defendido por los fieles”.
El sitio Religión Confidencial recogió declaraciones que advierten que una demolición de la Cruz sería el primer paso en la descristianización del Valle y su transformación en un “parque temático”. “Sin la Cruz monumental, que representa un símbolo cristiano, ni la Abadía ni la Basílica tendrían razón de ser”, denunciaron. Sin embargo, los monjes confían en que no será fácil llevar a cabo estos proyectos, ya que el decreto que ordena la exhumación de los restos afecta a los cuerpos de 19 monjes benedictinos y está “lleno de abusos de derechos”.
Los religiosos se mantienen al margen del debate público y negaron haber tenido contacto con representantes de Patrimonio Nacional, que visitaron la Basílica. “Esta visita se realizó en un día en que estaba y debía permanecer cerrada, sin ningún tipo de conocimiento, advertencia previa ni preceptiva autorización por parte de su Rector, contrariamente a lo que ha venido sucediendo a lo largo de sus sesenta años de existencia”, manifestó un comunicado oficial de la Abadía. Los religiosos aclararon que sólo supieron de la visita posteriormente a través de los medios de comunicación.+
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