El lema del viacrucis extremo de este año es “Iglesia del siglo XXI”. Los peregrinos pueden realizar este viacrucis solos o en pequeños grupos, y cuentan con una aplicación especial con GPS que los guía en la travesía. Durante el camino se detienen en los puntos designados para cada una de las estaciones y leen las reflexiones sugeridas. El viaje suele terminar al amanecer y el destino en casi todas las rutas es un santuario.
“Es extremo porque hay que caminar al menos 40 kilómetros de noche”, explicaron los organizadores en la presentación oficial y aclararon que los peregrinos deben andar solos o en silencio, sin sostener conversaciones ni realizar “picnics”. “Debe ser doloroso para que deje su comodidad y le diga a Dios: No estoy aquí porque tenga algo que hacer por mí, sino porque quiero encontrarme contigo. Este es el camino a una nueva vida”.
Componen la red del viacrucis extremo 932 rutas ubicadas en 422 poblaciones de 25 estados, de forma que los devotos pueden encontrar una ruta cerca a su lugar de residencia. Se los motiva a asistir a la misa de las 8 de la noche para luego iniciar el recorrido y se pide guardar silencio desde la llegada a la primera estación. Se invita a los fieles a llevar una cruz de madera y la indumentaria y elementos necesarios para enfrentar la noche a la intemperie en condiciones climáticas variables.
El viacrucis extremo es una iniciativa de Meska Strona Rzeczywistosci (El lado masculino de la realidad), una organización de hombres católicos que apoya la vivencia de la fe desde la virilidad. Sus miembros fomentan la vida de oración diaria combinada con los deportes y actividades de servicio, con apoyo a su proyecto de vida profesional y cuidando sus relaciones sentimentales y familiares desde una visión católica.+
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