Los festejos marianos llevan por lema “La espiritualidad pascual de los discípulos misioneros de Jesús” y se enmarcan en el camino al Jubileo de los 400 años del hallazgo de la imagen mariana y al Año Mariano Nacional y IV Congreso Mariano Nacional 2020.
La imagen de la Virgen cuatro veces centenaria fue trasladada en brazos por el obispo de Catamarca, monseñor Luis Urbanc, acompañado por sacerdotes del clero catamarqueño y del obispo de Añatuya, monseñor José Melitón Chávez, diócesis que también tiene a la Morenita del Valle como patrona.
Una multitud de fieles desbordó la catedral basílica y santuario mariano, para ser testigo de este momento en que la Madre de Jesús se acerca a su pueblo para inundar de gracia los corazones. Vivas, pañuelos flameando y rostros emocionados fueron los gestos de cientos devotos y peregrinos.
Participaron la gobernadora de Catamarca, doctora Lucía Corpacci, y el intendente de San Fernando del Valle de Catamarca, licenciado Raúl Jalil, entre otras autoridades provinciales y municipales.
En el momento de su reflexión, monseñor Urbanc expresó: “Bienvenidos a esta sentida celebración de la bajada de la Virgen al lado de su pueblo, de sus hijos, de sus pobres” y destacó que esta fiesta “nos adentra en la gran misión, casa por casa, que se irá realizando para internalizar y preparar convenientemente a toda la comunidad diocesana en vistas al Año Mariano Nacional, que comenzará el próximo 8 de diciembre, el IV Congreso Mariano Nacional, a celebrarse del 23 al 26 de abril del 2020 y nuestro jubileo por los 400 años del hallazgo de la bendita imagen de María Inmaculada”.
“Es a Ti, Virgen Madre, que recurrimos en nuestras necesidades, tanto materiales como espirituales, a fin de que en todo podamos agradar a nuestro Buen Padre Dios y honrarte con una vida más semejante a la Tuya, ya que sabemos del esmero que pones en prodigarnos amor, consuelo, ternura, bendiciones, fe, esperanza y paz para nuestros lacerados corazones, que luchan por revestirse de los sentimientos de tu amado Hijo Jesús”, afirmó.
“Ayúdanos, Madre preciosa, a ser más dóciles a la gracia de Dios, a fin de que fructifique la santidad en nuestras vidas, en nuestras familias y en toda la sociedad”, agregó.
Homenajes
Luego de la ceremonia tradicional de la bajada, los distintos sectores comenzaron con los homenajes: medios y comunicadores, los organismos eclesiásticos y los movimientos eclesiales, los catequistas, los gauchos y los niños y mujeres embarazadas, entre otros. Proseguirán los días subsiguientes.+
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