Participaron el arzobispo de Tucumán, monseñor Carlos Sánchez; el presbítero Juan Manuel Alurralde (Iglesia Católica Apostólica Ortodoxa del Patriarcado de Antioquía), el pastor Miguel Berti (Ejército de Salvación), el pastor Ángel Schoenberger (Iglesia Metodista de Tucumán) y el pastor Roberto García (Iglesia Anglicana).
Los representantes cristianos pidieron el don de la unidad y también rogaron a Dios que mitigue las consecuencias de esta pandemia que “afecta a todos”, especialmente a los más vulnerables.
A su turno, monseñor Sánchez invitó a rogar por “la plena unidad de los cristianos, a fin de que se cumpla el deseo de Jesús: ‘que todos sean uno, para que el mundo crea’”.
El prelado tucumano señaló que este momento de oración se realiza esta vez en “circunstancias especiales” y citó el texto evangélico del naufragio de Pablo y utilizó la misma imagen a la que apeló el papa Francisco el 27 de marzo, al proponer: “Estamos todos en una misma barca, todos frágiles, todos necesitados, pero todos importantes, todos necesarios”.
“Sabiendo que estamos juntos afrontando las contrariedades, animándonos unos a otros”, valoró, y agregó: “Tengan valor, confíen en Dios, que Él cumplirá todo lo que ha dicho”.
Monseñor Sánchez llamó a los cristianos a ser servidores y testigos de la esperanza en “este tiempo de difícil situación, en un mundo desgarrado por los miedos” y subrayó la necesidad de confiar en Dios utilizando un dicho popular: “Dios escribe derecho, en renglones torcidos”.
Los líderes cristianos de Tucumán rezaron juntos el credo nicenoconstantinopolitano.
El gesto se enmarcó en la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, que este año llevó por lema “Nos trataron con una solicitud poco común”.+
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