Doce diócesis argentinas cumplen sesenta años de creación

Buenos Aires (AICA): El 11 de febrero, festividad de Nuestra Señora de Lourdes, doce diócesis argentinas cumplirán 60 años de creación. El 11 de febrero de 1957 el papa Pío XII, con la bula «Quandoquidem adoranda», erigió 12 nuevas diócesis en el territorio argentino y elevó a arquidiócesis a dos sedes diocesanas: Tucumán y Bahía Blanca. Fue la creación en grupo más numerosa en la Argentina (le sigue la del 10 de abril de 1961 con 11 circunscripciones y luego la del 20 de abril de 1934 con 10 diócesis nuevas).

El 11 de febrero, festividad de Nuestra Señora de Lourdes, doce diócesis argentinas cumplirán 60 años de creación. El 11 de febrero de 1957 el papa Pío XII, con la bula «Quandoquidem adoranda», erigió 12 nuevas diócesis en el territorio argentino y elevó a arquidiócesis a dos sedes diocesanas: Tucumán y Bahía Blanca.

Fue la creación en grupo más numerosa en la Argentina (le sigue la del 10 de abril de 1961 con 11 circunscripciones y luego la del 20 de abril de 1934 con 10 diócesis nuevas).

El anuncio de la Santa Sede, que como es de práctica fue hecho público en forma simultánea en Roma y en Buenos Aires (aquí lo hizo el nuncio apostólico monseñor Mario Zanín), decía que «el Santo Padre elevó el número de jurisdicciones eclesiásticas en vista del considerable desarrollo civil y religioso en la Argentina y el crecimiento de su población, de manera de asegurar una asistencia espiritual más adecuada a los fieles argentinos».

Los doce nuevos obispados fueron: San Isidro, Morón, Lomas de Zamora, Mar del Plata y Nueve de Julio, en la provincia de Buenos Aires; Santa Rosa de Toay (hoy Santa Rosa), en La Pampa; Gualeguaychú, en Entre Ríos; Reconquista, en Santa Fe; Posadas, en Misiones; Formosa, en Formosa; Villa María, en Córdoba; y Comodoro Rivadavia, en el Chubut.

Con la erección de éstas, la Argentina pasó a tener 35 circunscripciones eclesiásticas, de las cuales, 9 arquidiócesis.

Algunos datos curiosos
Al crear las doce nuevas jurisdicciones eclesiásticas, el Santo Padre nombró a sus respectivos obispos (no hay rebaño sin pastor). De esos primeros obispos diocesanos surgen estos datos curiosos:

Sólo uno de ellos (monseñor Enrique Rau) era obispo (de Resistencia) y fue trasladado a la nueva diócesis de Mar del Plata; los once restantes fueron elegidos y consagrados ese mismo año 1957.

De estos nuevos obispos, cinco eran religiosos (2 salesianos, 1 franciscano, 1 pasionista y 1 verbita).

Solo dos eran porteños (monseñor Antonio María Aguirre y monseñor Juan José Iriarte); 4 nacidos en diversas localidades bonaerenses (monseñor Alberto Deane CP, monseñor Enrique Rau, monseñor Mariano Pérez SDB y monseñor Jorge Mayer); 2 cordobeses (monseñor Filemón Castellano y monseñor Miguel Raspanti SDB); 1 catamarqueño (monseñor Agustín Adolfo Herrera); 1 correntino (monseñor Jorge Ramón Chalup), 1 santafesino (monseñor Raúl Marcelo Scozzina OFM) y 1 entrerriano (monseñor Jorge Kemerer SVD).

Todos pertenecían a una misma generación (nueve de ellos tenían entre los 40 y 49 años).

Monseñor Scozzina fue el obispo más joven de la Iglesia en la Argentina con 36 años.

De esos doce pastores, tres fueron promovidos a una sede arzobispal: monseñor Carlos M. Pérez SDB, arzobispo de Salta; monseñor Jorge Mayer, arzobispo de Bahía Blanca y monseñor Juan José Iriarte, arzobispo de Resistencia.+

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