“Conmemoramos hoy un aniversario más de la fundación de esta ciudad, nos llena da alegría y agradecimiento. Recordamos con actitud agradecida a las personas que dieron inicio al camino recorrido, marcaron un rumbo. Quiero poner el acento en un detalle: no solamente trazaron la ciudad, velaron por la educación, la salud, la seguridad o tantas otras necesidades. Tuvieron presente a las personas de entonces y a quienes vendríamos detrás, nosotros, que nos beneficiamos del esfuerzo de tantos antecesores a lo largo de estos 105 años”, destacó en su mensaje.
“Nos toca a nosotros seguir ese camino de servicio que hace a la promoción de las personas, a una vida digna, teniendo en cuenta que esto no implica solo construcciones edilicias o asfalto, si no lo que podemos aportar todos con nuestro ejemplo, con nuestro amor al bien y a la justicia”, aseguró.
El prelado detalló que “los padres pueden aportar cuidando a sus hijos para que sean buenos ciudadanos llenos de sanas cualidades, de valores humanos: es muy importante la familia; los educadores aportarán desde su sitio y cada uno desde su función en la sociedad”.
“Todos podemos construir una ciudad y un mundo mejor sin perder de vista que el centro son los ciudadanos llamados a crecer como personas en el bien y en la verdad. Compete a todos sin distinción de clases ni de profesión religiosa”, aseveró.
Por último, monseñor Barbaro pidió a Dios que “siga bendiciendo a todas las personas de esta querida ciudad de Presidencia Roque Sáenz Peña”.+
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