“Las mujeres somos puente, como el arte, nuestro ser mujer es puente”, manifestaron. “Tantas veces participamos en reconciliar a los que están peleados, a ‘reducir fracturas’ y quiebres en la humanidad y en nuestras propias familias. Y cuando rechazamos ese ‘ser puente’, entonces nos puede pasar de herir, desgarrar, dividir”.
Las palabras finales estuvieron a cargo de Ségolène du Closel, francesa socióloga e investigadora especialista en bioética. Basándose en el concepto de libertad, manifestó: “La libertad, no se agota con un lema nacional, no culmina en una estatua internacionalmente famosa, no cabe ni siquiera en nuevos derechos o leyes. No soy más libre cuando tengo más autorizaciones, permisos, pases: eso es solo una libertad exterior, casi ‘de circulación’”.
Y prosiguió: “Somos libres, cuando acogemos al otro, tal como es; somos libres, cuando dejamos al otro ser y crecer; somos libres, cuando decidimos abrirnos al más débil y no excluir a nadie; somos libres cuando aceptamos nuestras fragilidades; somos libres cuando decidimos hacernos responsables de nuestros actos y de sus consecuencias en los demás”.+
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