En Semana Santa, Mons. Caride propone "unirnos afectivamente a Jesús"
El obispo recomendó comenzar, en el Domingo de Ramos, tratando de pensar “¿Cómo llego a esta Semana Santa?¿Qué es lo que estoy viviendo?”, y aconsejó: “Para vivir bien la Semana Santa, necesitamos unirnos afectivamente a Jesús; poder estar con Él en la Última Cena: poder estar caminando con Él en el viacrucis, poder estar presentes cuando escuchamos la buena noticia de que Jesús resucitó, poder unirnos afectivamente. Por eso lo importante que es poder participar de cada una de las celebraciones”.
En su mensaje, monseñor Caride también propone: “Si estos días son los que aprovechás para descansar, y te vas a otro lugar, tratá de ubicar dónde hay una parroquia cerca para participar de las celebraciones, y llevá el Evangelio en el bolso, así podés ir mirándolo a Jesús en la pasión, como lo relatan Mateo, Marcos, Lucas o Juan: poder mirarlo a Jesús”.
“Y entonces quizás el Jueves Santo, cuando estés presente ahí, cuando lava los pies Jesús, pensar: ¿En qué o a quién necesito aprender a servir? O el Viernes Santo, caminando junto a Jesús, con la cruz, pensar en aquellos dolores que quiero unir a Jesús, o también puedo pensar en los dolores de otro que quiero unir a Jesús”, animó.
“El Viernes Santo es un día para poder experimentar de una manera más fuerte la misericordia de Dios que nos abraza, también en nuestros pecados. Por eso la Semana Santa es una buena oportunidad para reconciliarse”, consideró.
“Cuando visites alguna de las iglesias, quédate mirando la cruz, para ver hasta dónde llega el amor por vos. Jesús está allí por mí, me está abrazando en mi dolor y también en mis debilidades y pecados”, aseguró.
“Y el sábado santo, cuando vaya llegando la noche, vamos a empezar a celebrar la Pascua. A través de todos los signos que tiene esa celebración, del fuego, de la luz, del agua, del pan y el vino, nos va a ayudar a que afectivamente nos unamos a Jesús que resucita”, sostuvo.
Finalmente, monseñor Caride propuso: “El domingo de Pascua, al comulgar, darle gracias a Jesús: Él está vivo y permanece con nosotros, alimentando nuestra fe, nuestra esperanza y nuestra caridad”, concluyó.+
Publicar un comentario