Asistieron las parroquias de la catedral Santa María del Patrocinio (Ciudad de Buenos Aires), Santa Olga (Villa Adelina), San Miguel Arcángel (San Miguel), Virgen de la Ternura (Haedo), Espíritu Santo (Llavallol), Nuestra Señora del Perpetuo Socorro (Sarandí), San Andrés apóstol (Villa Caraza) y Nuestra Señora de la Asunción (Berisso).
Además de los sacerdotes de las parroquias, participaron religiosas de la orden de San Basilio Magno y de la Congregación Siervas de María Inmaculada, y los seminaristas eparquiales.
En su homilía, Monseñor Kozelinski exhortó a los fieles a seguir el consejo del papa Francisco en su última visita a Loreto, a “transformar cada hogar en la casa de la Virgen, para que esté presente en cada paso de nuestro camino de vida cristiana”.
Luego de la celebración eucarística, todos se trasladaron a la capilla ucraniana de la Cripta, donde se encuentra el ícono de la Virgen orante, y se rezó el Moleben por las intenciones de la eparquía ucraniana en Argentina, por Ucrania en este delicado momento de elecciones, y por el Patriarca Sviatoslav, que ese mismo día cumplía 10 años de consagración espiscopal.+
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