Ciudad del Vaticano (AICA): El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, padre Federico Lombardi SJ, informó que el papa Francisco llamó por teléfono, en la tarde del lunes, al patriarca Teodoro II para expresarle su profundo pesar y cercanía espiritual, por el reciente asesinato brutal de unos cristianos coptos a manos de fundamentalistas islámicos. El Santo Padre aseguró su oración y hoy, martes, día de la celebración de los funerales de las víctimas, se unirá espiritualmente a las oraciones y al dolor de la Iglesia copta, en la celebración de la Eucaristía de la mañana.
El Santo Padre aseguró su oración y hoy, martes, día de la celebración de los funerales de las víctimas, se unirá espiritualmente a las oraciones y al dolor de la Iglesia copta, en la celebración de la Eucaristía de la mañana.
El autoproclamado Estado Islámico (ISIS, por sus siglas en inglés) difundió este domingo un vídeo que muestra la decapitación de una veintena de cristianos coptos que fueron secuestrados en Libia. El último capítulo de una macabra lista de brutales asesinatos por parte de la organización terrorista.
Las víctimas habían sido capturadas en la ciudad de Sirte, en dos incidentes aislados, en diciembre y enero. A pesar de la inseguridad y el caos que padece Libia, desde la caída del régimen de Muamar el Gadafi, allí viven miles de egipcios que han dejado su país ante la falta de expectativas.
“No me voy, no abandono a los cristianos”
El Vicario Apostólico de Trípoli, monseñor Giovanni Innocenzo aseguró a Radio Vaticano: “Mi misión es ser testigo de Jesús. "¡tengo que quedarme! ¿Cómo voy a dejar a los cristianos sin nadie?". "Estamos aquí para ser testigos de lo que Jesús nos dice que hagamos. Y eso es todo", añadió. "Si no fuera por la fe, no estaríamos aquí", enfatizó.
Ante las graves circunstancias que está atravesando Libia, el prelado franciscano pidió a la comunidad internacional que sea "capaz de iniciar un diálogo con este país que está dividido". Asimismo, realizó un llamamiento a "ser instrumentos de unidad, sobre todo para el propio país y luego para el resto".
Monseñor Martinelli lamentó también que "pensamos en el petróleo, pensamos en nuestros intereses y nos olvidamos del diálogo humano, sincero, entre las partes". En esta línea, apostó por un "diálogo fraterno entre civilizaciones".
Para el Vicario Apostólico de Trípoli, "los musulmanes podrían también hacer lo posible para encontrar una cierta serenidad". "No es fácil, esto, ahora no es fácil. Sin embargo, creo que es la única manera de hacer posible este encuentro", ha reconocido.
El prelado franciscano concluyó sus declaraciones asegurando que la financiación de los yihadistas proviene de "los pozos de petróleo de Libia, los del Golfo Pérsico, etcétera".+
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