Durante la jornada se celebraron varias misas y hubo una particular procesión con agrupaciones gauchas. La celebración eucarística principal fue a las 10 y la presidió el obispo de San Francisco, monseñor Sergio Buenanueva.
En su mensaje a los fieles, monseñor Buenanueva recordó que el peregrinar es “una expresión visible del camino interior que es nuestra propia vida” y una imagen de la fe, entendida como “caminar continuo hacia la meta de la madurez que corresponde a la plenitud de Cristo”.
El obispo explicó que el cuerpo tiene su plenitud y su deterioro, pero no así el espíritu, que siempre debe ir hacia delante, levantándose de sus caídas, reponiéndose del cansancio y recuperándose de las formas de desaliento o desesperanza. También llamó a caminar unidos, porque “caminar en solitario es siempre más difícil, si no imposible”.
Monseñor Buenanueva también explicó que el camino de la vida a veces debe transitarse en silencio, y advirtió cómo mucha gente “tiene miedo” a emprender en su vida este itinerario que puede llevarlo a preguntarse sobre temas fundamentales de la vida.
“Imagínense ustedes si de verdad los argentinos nos animáramos a preguntarnos en serio qué tipo de país le estamos construyendo a las nuevas generaciones, qué valores, qué verdades, qué convicciones. Mejor es prender la TV y buscar algún programa que nos seduzca y nos haga pensar en otra cosa o, mejor aún, que no nos deje pensar”, opinó el prelado.
El obispo también consideró que cada cristiano es, como María y con ella, peregrino en la fe: “Este caminar desde la fe y en la fe tiene una meta, que es el estado de hombre perfecto y a la madurez que corresponde a la plenitud de Cristo. El camino interior de la fe, lo que está creciendo en nosotros, es la figura misma del Señor resucitado”.
Monseñor Buenanueva aseguró que Dios modela la vida de cada uno de sus hijos e hijas para hacerla semejante a la de Jesús, su Hijo”.
Celebrando la solemnidad de la Ascensión del Señor, el obispo invitó a continuar este camino de fe y avanzar con María hasta la meta de la madurez en Cristo. Finalmente, invitó a rezar a María Auxiliadora “para que nunca falte el pan del amor y de la verdad en nuestras familias”.+
This entry passed through the Full-Text RSS service - if this is your content and you're reading it on someone else's site, please read the FAQ at fivefilters.org/content-only/faq.php#publishers.
Publicar un comentario