Por su parte los huelguistas informaron al cardenal Urosa que enviaron una carta al papa Francisco para que conozca lo que ocurre en Venezuela. “Tenemos fe en Dios, tenemos fe en la Iglesia y tenemos fe en el Papa”.
“Yo lamento mucho lo de las huelgas, me parece que es un gesto que manifiesta sacrificio, pero por otra parte es peligroso para su salud y no conviene que sigan adelante con esa huelga”, recalcó el cardenal Urosa Savino y exhortó a los dirigentes políticos Daniel Ceballos, Leopoldo López y a los jóvenes que los acompaña que desistan de seguir en la huelga de hambre.
El arzobispo de Caracas aseguró que las acciones de protesta extrema emprendidas por Daniel Ceballos, Leopoldo López y el grupo de estudiantes, demuestran lo que a su juicio es la poca voluntad del gobierno por atender las solicitudes de estos sectores.
Por su parte el Secretario general de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), padre Víctor Hugo Basabe, invitó a las autoridades competentes a dar una respuesta a la situación de los estudiantes y líderes de la oposición que están en huelga de hambre.
El padre Basabe, hablando en una radio local, dijo que dentro de la CEV se habló del estado actual de los llamados “prisioneros políticos” y se expresó una gran preocupación por el deterioro de la situación.
El papa Francisco no tiene planeado visitar Venezuela
“En mi opinión, mientras esto no cambie (el problema de los presos políticos), que se olvide Nicolás Maduro de que el Sumo Pontífice vendrá a Venezuela”, dijo monseñor Roberto Lückert, arzobispo de Coro, en conversación telefónica con el periódico La Verdad luego del encuentro con el Sumo Pontífice, el pasado viernes 29 de mayo, en la biblioteca del Palacio Apostólico del Vaticano.
“El papa Francisco recibió la visita de monseñor Lückert para hablar de un tema que desde hace algunos meses lo tiene bastante “preocupado”: Venezuela.
En la reunión, que se extendió unos 20 minutos, el arzobispo de Coro le hizo al Santo Padre un diagnóstico sobre la crisis política, económica y social que vive el país. “Me escuchó con mucha atención. Le dejé por escrito algunas otras cosas para que las leyera luego. Me dijo que estaba siguiendo de cerca todo lo de Venezuela, sobre todo, la situación de la violencia y la de los presos políticos”, detalló monseñor Lückert.
En referencia a la visita que el presidente Nicolás Maduro realizará el próximo domingo 7 de junio al Santo Padre, monseñor Lückert señaló que obedece a un “interés político”, porque él y su equipo saben que la figura del Papa tiene en este momento una gran relevancia en América Latina.
Finalmente el arzobispo de Coro señaló que “la posición de la Iglesia debe ser la de siempre: ponernos de parte del pueblo que sufre y del pueblo injustamente tratado por un Gobierno que fue ineficaz en estos casi 16 años que lleva. La Iglesia tiene que tomar una posición de denuncia para construir. Nosotros no estamos parcializados con la oposición, estamos parcializados con el país, que necesita que nosotros seamos la voz de los que no tienen voz, porque la historia nos va a reclamar a la Conferencia Episcopal Venezolana haber sido en estos momentos perros mudos. Creo que si las cosas no cambian, vamos a tener que ser ese interlocutor para que el mundo abra los ojos sobre lo que pasa en el país”. +
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