La celebración eucarística será presidida por monseñor Joaquín Mariano Sucunza, obispo auxiliar y vicario general de Buenos Aires, quien al término de la Eucaristía rezará un responso ante el altar donde están los restos mortales del cardenal Quarracino.
El arzobispado de Buenos Aires invita a todos los miembros de la comunidad arquidiocesana a asistir a la misa del domingo 3 de marzo. La convocatoria e invitación incluye esta oración: "Señor, te encomendamos a nuestro obispo Antonio. Aunque él está muerto ante nosotros sin embargo vive en tu presencia. Por tu inmensa bondad recíbelo en tu casa para que pueda gozar eternamente de la vida".
Una muerte anunciada
Pocas horas antes de morir en Roma su entrañable amigo, el cardenal Eduardo Pironio, el cardenal Quarracino se había comunicado con él desde Buenos Aires, y con voz entrecortada por el llanto le dijo: “Querido Eduardo: vas a ir al cielo, y al llegar decile a la Virgen que pronto podamos reunimos allí nuevamente”.
El 13 de febrero Quarracino presidió las exequias de Pironio en Buenos Aires, y el 14 lo despidió en la basílica de Luján con palabras llenas de afecto. Le dijo al finalizar “Hasta cualquier momento, cardenal Pironio”. Catorce días después falleció.+
Publicar un comentario