Con el lema “Vamos con María misionando con alegría”, se reunieron chicos de las parroquias, grupos de Acción Católica, catequesis, misioneros, scouts y colegios, entre otros, para recorrer a pie los doce kilómetros que distan desde Lomas hasta Longchamps, con una pausa de descanso en la casa de Betharrám, Adrogué.
Monseñor Jorge Lugones SJ, obispo diocesano, desde Zamora, España, envió un saludo a los participantes y colaboradores de la peregrinación, deseó “un hermoso día” y destacó “el fervor y el ánimo” de los niños, adolescentes y jóvenes.
“Que todos puedan tener un día especial”, dijo, y que “disfruten ese caminar con la Virgen, que es como en la vida; la Virgen nos acompaña en la vida y siempre nos lleva a Jesús”, manifestó monseñor Lugones, quien luego de concluir el sábado la visita ad límina apostolorum en la Santa Sede, viajó a España para una actividad del movimiento Cuidadores de la Casa Común.
Monseñor Jorge Torres Carbonell, obispo auxiliar de Lomas de Zamora, presidió la misa de cierre. Como cada año, la caminata juntó alimentos no perecederos como gesto solidario, para colaborar con los sectores más necesitados de la diócesis.+
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