En presencia de miles de turistas que vivieron la colorida fiesta religiosa, el obispo presidió la ceremonia religiosa y la procesión con las imágenes de San Salvador y de la Sagrada Familia, que luego continuó en el Buque Pesquero Francesca, surcando las aguas del puerto.
Luego monseñor Mestre hizo una oración especial por los fallecidos en el mar, por los Tripulantes del Ara San Juan y se arrojaron ofrendas florales al mar. Asimismo, bendijo los frutos de mar y artes de pesca.
En su mensaje a los pescadores, el prelado comenzó dando gracias a Dios “por el don bendito del mar y sus frutos que permite el trabajo y la posibilidad real de que el pan cotidiano llega a la mesa de muchas familias. Damos gracias a Dios por el trabajo generoso y abnegado de los pescadores, los hombres de mar, y tantas mujeres que trabajan en los diversos estamentos de la industria pesquera local”.
Asimismo, dijo que “la acción de gracias se une a la súplica”, y pidió a Dios “que abra los corazones de todos, especialmente de nuestros gobernantes, para que siempre puedan cuidar y defender las fuentes de trabajo de nuestro puerto al servicio de la producción y economía local y regional”.
“Que desde el ámbito político se promueva el desarrollo integral, abierto siempre a las nuevas tecnologías, pero con una mirada profundamente social donde el centro siempre sea el ser humano y el bien común”, añadió monseñor Mestre.
Recordando el mensaje del papa Francisco al Foro Mundial de Davos 2020, mencionó: “Todos somos miembros de la única familia humana, de allí emana el deber moral de cuidar unos de otros y por eso situar a la persona humana en el centro mismo de la política. Que siempre esté garantizada la seguridad de los que trabajan en tierra y, sobre todo, en el mar”.
Finalmente, pidió a Jesús y a María que con su bendición “protejan a cada persona y familia, que asista siempre a nuestro puerto, la ciudad y la querida Patria argentina. Que conceda la luz que no tiene fin a los que han partido mientras trabajaban en el mar”.
El acto finalizó con un homenaje a la Patria, entonando las estrofas Himno Nacional Argentino. Luego, la procesión regresó a la parroquia donde el párroco Miguel Caciutto hizo la bendición final con el Santísimo Sacramento.+
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