Los obispos de Mendoza aseguran que sin los catequistas no se puede crecer en la fe

Los obispos de Mendoza aseguran que sin los catequistas no se puede crecer en la fe

Mendoza (AICA): El arzobispo de Mendoza, monseñor Carlos María Franzini, y el obispo auxiliar, monseñor Dante Gustavo Braida, agradecieron el servicio invalorable que ofrecen los catequistas al saludarlos por su día y destacaron que “sin el ministerio de los catequistas no se puede crecer en la fe y, por tanto, sin ellos las comunidades quedarían sin su sustento”. Tras exhortar a realizar una autocrítica de la tarea catequística, le pidieron a cada uno de los catequistas que “se cuestione sobre las propias debilidades para renovarse y servir con creciente entusiasmo y responsabilidad”.

El arzobispo de Mendoza, monseñor Carlos María Franzini, y el obispo auxiliar, monseñor Dante Gustavo Braida, agradecieron el servicio invalorable que ofrecen los catequistas al saludarlos por su día y destacaron que “sin el ministerio de los catequistas no se puede crecer en la fe y, por tanto, sin ellos las comunidades quedarían sin su sustento”.

“En esta fecha es oportuno reconocer el valioso servicio que ofrecen los catequistas a sus comunidades en la construcción cotidiana de la Iglesia, transmitiendo la fe recibida de los mayores. Con el Evangelio reconocemos que todos somos ‘simples servidores’, pero no por ello dejamos de reconocernos privilegiados por esta invitación del Señor para colaborar en su obra”, subrayaron.

Los prelados recordaron que “conforme a la propuesta de la Carta Pastoral de Cuaresma queremos vivir nuestro camino pastoral como un camino de conversión y reparación”, al reconocer que “no todo está bien en la catequesis”.

“A veces somos poco serios y constantes en la tarea; a veces nos dejamos tomar por el cansancio o la improvisación; a veces no favorecemos la comunión en las comunidades; a veces somos poco pacientes con las debilidades ajenas o somos poco acogedores con quienes se han alejado”, precisaron y agregaron: “Será necesario que cada uno se cuestione sobre las propias debilidades para renovarse y servir con creciente entusiasmo y responsabilidad”.

Los obispos de Mendoza exhortaron a “buscar apasionadamente al Señor e invitarlo a nuestra ‘casa’” y señalaron que “sólo profundizando el encuentro con Él podremos ser cada día más y mejores discípulos misioneros del Evangelio”.

Monseñor Franzini y monseñor Braida indicaron que con ese objetivo es necesario “afianzar más aún nuestra vida eucarística, uniéndonos a la preparación de toda la Iglesia en la Argentina del próximo Congreso Eucarístico Nacional”.

“La Palabra de Dios, saboreada y profundizada en la oración cotidiana; el Catecismo de la Iglesia Católica, como segura referencia doctrinal de nuestro servicio y una delicada atención a los hermanos más pobres serán indispensables en este camino de conversión y reparación, al que estamos todos convocados”, concluyeron.+
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