El programa del jubileo fue pensado para ofrecer a los participantes la posibilidad de reflexionar sobre la importancia del papel del diácono como imagen de la misericordia para la promoción de la nueva evangelización.
Ofrecerá también momentos para la escucha, el intercambio de experiencias y la oración con el fin de comprender mejor el papel del diácono como servidor de la caridad.
Habrá un tiempo dedicado a la peregrinación personal a las iglesias de Roma dedicadas a San Lorenzo y, divididos en grupos lingüísticos, se realizará la peregrinación a la Puerta Santa de San Pedro. En las tres iglesias jubilares, todas ellas situadas en las inmediaciones de San Pedro, se podrá participar de la Adoración Eucarística y del Sacramento de la Reconciliación.
Las tres jornadas finalizarán el domingo por la mañana, con la misa celebrada por el papa Francisco en la Plaza de San Pedro para los diáconos y sus familias.
“Esta celebración tiene una gran importancia porque precisamente los diáconos permanentes expresan la caridad, el amor misericordioso de Dios Padre, no únicamente a la comunidad cristiana sino a toda la humanidad”, señaló monseñor Jorge Carlos Patrón Wong, secretario para los seminarios en la Congregación del Clero, a Radio Vaticana.
Monseñor Patrón Wong agradeció a los diáconos permanentes y a sus familias, “porque tenemos ejemplos vivos de una calidad humana, una capacidad de generosidad, de cercanía, de discreción, una capacidad de pasar a ‘segundo plano’, de no ser protagonistas, pero sí ser alma y corazón de la presencia del amor misericordioso de Dios, porque un diácono permanente trabaja con los laicos, trabaja con los sacerdotes en comunión con los Obispos, está verdaderamente en el corazón de la Iglesia porque trabaja con todas las vocaciones, dentro de la Iglesia, y con todos los agentes sociales, dentro de la propia comunidad, la sociedad”, expresó.
Finalmente señaló que el encuentro que tendrán con el papa Francisco ayudará muchísimo a revalorar la vocación de los diáconos permanentes y lanzarlos también a ellos en esta acción de amor, de misericordia, de una Iglesia que está en salida, que es una Iglesia que está en búsqueda de resolver las situaciones de sufrimiento, de dolor que Dios no quiere y quiere que todas estas sean resueltas a través de la caridad, del amor”.
“Los diáconos permanentes no vienen simplemente a sustituir al sacerdote, donde no hay sacerdotes, el diácono permanente tiene una vocación específica de servicio en la caridad y esto es necesario en todas las Iglesias locales”, concluyó monseñor Patrón Wong.+
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