Los disturbios se produjeron cuando un grupo de manifestantes desvió su camino de la columna principal, que iba hacia el Monumento, y se dirigió hasta la catedral, donde se encontraba un grupo de policías con palos, escudos y armas con municiones de goma.
Durante los incidentes al menos treinta personas resultaron heridas, entre ellos un reportero gráfico de la agencia Telam y diez agentes de seguridad.
Al mediodía, militantes de una agrupación de izquierda bailaron semidesnudas frente a la catedral de Rosario para reclamar la legalización del aborto.
Los días previos al encuentro de mujeres, las hermanas Arbizu advirtieron sobre la violencia creciente y el odio anticatólico en estas jornadas feministas, a las que ellas asisten desde 2005.
En tanto, el arzobispo de Rosario, monseñor Eduardo Eliseo Martín, objetó el lema "saquen sus rosarios de nuestros ovarios", que utilizan en sus marchas, al considerar que "en los ovarios no hay ningún rosario, esas son expresiones de intolerancia".
"La verdad es que en los ovarios no hay ningún rosario y cada persona decide cómo vive su vida. No le imponemos nada a nadie. Son expresiones con las cuales no estoy de acuerdo y ejercen una cierta violencia verbal. De la abundancia del corazón habla la boca", sostuvo en declaraciones radiales. +
El domingo la marcha feminista pasará por la catedral local, por lo que el arzobispo reclamó a las autoridades que dispongan medidas para "evitar posibles desmanes”, aunque reconoció que el tema es “siempre una preocupación”.
"La Iglesia puede tener enemigos, pero nosotros no somos enemigos de nadie. Si alguien tiene algo en contra puede expresarlo, lo que pedimos sí es el respeto. Eso es lo fundamental en una sociedad civilizada y en donde estamos juntos. Y el gran desafío siempre es vivir juntos", agregó.+
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