Los obispos mendocinos repudian la violencia en una provincia conmovida por tres femicidios
Los prelados mendocinos expresaron en un mensaje su “cercanía espiritual y solidaridad” con las víctimas, sus familiares y sus seres queridos, y exhortaron a trabajar por la paz social.
“Hace dos años, los obispos argentinos publicamos una declaración sobre la violencia en nuestra Patria que sigue dolorosamente vigente, también entre nosotros”, recordaron, y reiteraron aquellas reflexiones “como un sencillo aporte a la sociedad mendocina”.
“Nos debemos un debate sereno y honesto, haciéndonos cada uno cargo de la cuota de responsabilidad que podamos tener en esta lamentable situación en la que nos encontramos y en buscar los medios eficaces para revertirla”, sostuvieron.
Texto del mensaje
Ante los recientes hechos de violencia que vuelven a lastimar a la sociedad mendocina queremos manifestar ante todo nuestra cercanía espiritual y solidaridad con las víctimas, sus familiares y sus seres queridos.
Manifestamos nuestro más firme repudio a toda forma de violencia, convencidos de que el camino para superarla es el de una renovada opción por la paz, que brota del corazón y se proyecta hacia la familia, su entorno más inmediato y toda la sociedad.
En este contexto queremos recordar la exhortación del Apóstol San Pablo: “No te dejes vencer por el mal. Por el contrario, vence el mal, haciendo el bien…” (Rom 12,21). Esta Palabra nos ilumina a todos: cristianos, creyentes de otras denominaciones y hombres y mujeres de buena voluntad. Iluminados y animados por esta Palabra queremos invitarlos a trabajar activamente en favor de la paz de los corazones, la paz de las familias y la paz social.
Hace dos años, los obispos argentinos publicamos una declaración sobre la violencia en nuestra Patria que sigue dolorosamente vigente, también entre nosotros. Por ello hemos querido volver a proponer estas reflexiones como un sencillo aporte a la sociedad mendocina. Nos debemos un debate sereno y honesto, haciéndonos cada uno cargo de la cuota de responsabilidad que podamos tener en esta lamentable situación en la que nos encontramos y en buscar los medios eficaces para revertirla.
Nuestra Madre del Rosario, cuya Fiesta patronal celebraremos el próximo domingo, nos ayude a encontrarnos como hermanos, miembros de una misma familia, comprometidos en construir cotidianamente la cultura del encuentro y la amistad social.
Publicar un comentario