Dos de las familias recibidas, que en Siria sufrieron secuestros y otras discriminaciones a causa de la religión cristiana, llegaron en el mes de marzo a Italia.
Una de las familias está compuesta por una madre con dos hijos adolescentes, una abuela, una tía y otra mujer siria que vive con ellos. La segunda es una pareja joven, a la cual le nació hace dos semanas su primera hija, de nombre Stella. La mamá fue raptada por varios meses por el Estado Islámico y ahora, en Italia, recuperó la serenidad y la tercera familia está compuesta por los padres y dos hijos: la primera hija está enferma, pero ahora está en camino de integración. Los niños asisten regularmente a las escuelas primarias y la mamá está inscrita en una licenciatura para mediadores culturales y hace unos pocos días atrás inició unas prácticas profesionales.
Son tres los departamentos de propiedad del Vaticano que desde hace más de un año, están destinados a recibir a familias de refugiados sirios, llegados a Italia gracias a los corredores humanitarios promovidos por la asociación católica Comunidad de San Egidio, la Federación de las Iglesias Evangélicas en Italia y de la Iglesia Valdense.
Hasta hoy, a través de la iniciativa de los corredores humanitarios, fueron acogidos en Roma 70 núcleos familiares por un total de 145 personas. Además, la Santa Sede sigue sosteniendo económicamente también a las 21 personas llegadas a Italia con el papa Francisco desde la isla de Lesbos, que fueron acogidas en algunas casas de privados y de instituciones religiosas.+
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