Monseñor Gerhard Müller
Ciudad del Vaticano (AICA): Durante una entrevista concedida en los últimos días de 2013 al diario italiano Corriere della Sera, Mons. Gerhard Müller reafirmó lo que había dicho en otra ocasión a los miembros del Congreso Teológico Internacional, entre otras cuestiones, sobre la pastoral de los divorciados y sobre la naturaleza de las Conferencias Episcopales dentro de la organización de la Iglesia. ¨Usted no puede ajustar la Doctrina de la Iglesia a las circunstancias¨, afirmó el prelado. ¨La Iglesia no es un partido político que hace sondeos para buscar consenso¨.
El arzobispo Gerhard Ludwig Müller, quien en el consistorio que se llevará a cabo el 22 de febrero próximo será creado cardenal por el papa Francisco, es el prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, uno de los principales dicasterios de la Curia Romana, encargado de la preservación de la integridad de la doctrina católica. De este dicasterio fue prefecto el cardenal Joseph Ratzinger, luego papa Benedicto XVI.
Pastoral de los divorciados
Monseñor Müller también se refirió a una declaración sobre el acceso a la comunión de los divorciados en segunda unión, hecha por el teólogo disidente Hans Küng, quien dijo que “el Papa quiere avanzar, pero el Prefecto de la Fe lo frena”. Al respecto, monseñor Müller precisó: “yo estoy y siempre estaré con el Papa. La verdad es que no podemos aclarar estas situaciones con una declaración general.
El prelado señaló el punto de equilibrio al que apunta la Iglesia: "Tenemos que intentar una combinación de principios generales y situaciones personales y particulares. Encontrar soluciones a problemas individuales, aunque siempre sobre el fundamento de la doctrina católica".
El Prefecto también se refirió a la carta que escribió para ordenar el retiro de una guía pastoral en la diócesis alemana de Friburgo que contenía "terminología poco clara" sobre la firme defensa de la Iglesia del carácter indisoluble del Matrimonio y la adecuada preparación para recibir la Eucaristía. Sobre la controversia originada por el documento, monseñor Müller alertó sobre las falsas expectativas de cambios en la doctrina suscitadas en la opinión pública. "Muchos piensan que el Papa o un Sínodo puede decir: 'por supuesto, reciban la Comunión'. Pero esto no es posible".
"El Matrimonio sacramental válido es indisoluble", reafirmó el prelado. "Esta es la práctica católica, reafirmada por Papas y Concilios, en fidelidad a las palabras de Jesús. Y la Iglesia no tiene la autoridad para relativizar la palabra y los mandamientos de Dios". El Prefecto recordó que la Eucaristía sí tiene un aspecto medicinal y el sacramento no exige la perfección para poder ser recibido, pero que un matrimonio irregular sí constituye un "obstáculo objetivo para la recepción de la Eucaristía".
La naturaleza de las Conferencias Episcopales
Entre otros temas consultados al Prefecto, se mencionó la posibilidad de la reforma de la Iglesia con respecto a las Conferencias Episcopales y su relación con la Santa Sede. En este punto, monseñor Müller aclaró los alcances de dichas organizaciones, que no pueden considerarse como independientes o totalmente autónomas y rechazó las interpretaciones en este sentido de las palabras del Papa Francisco en la carta encíclica Evangelii Gaudium.
El arzobispo dijo que algunos la interpretan “como si el Santo Padre quisiera favorecer una cierta autonomía de las Iglesias locales, la tendencia a distanciarse de Roma. Pero esto no es posible. El particularismo, como el centralismo, es una herejía. Sería el primer paso hacia la autocefalia”.
"La Iglesia Católica está compuesta de Iglesias locales, pero es Una", afirmó el Prefecto. "Las iglesias 'nacionales' no existen... los presidentes de las Conferencias Episcopales, aunque muy importantes, son coordinadores, nada más, ¡no son vicepapas!".
Esta aclaración tiene origen en una consideración teológica sobre el ministerio episcopal. Según explicó monseñor Müller, “el Pontífice romano y los obispos son de derecho divino, instituidos por Jesucristo. También la colegialidad y la colaboración entre los obispos, cum Petro y sub Petro (con Pedro y bajo Pedro), tienen aquí su fundamento. Pero los patriarcados y las conferencias episcopales, históricamente y hoy, pertenecen solo al derecho eclesiástico, humano. Los presidentes de las conferencias episcopales, muy importantes, son coordinadores, nada más, ¡no son vicepapas!”.
Incluso quienes sugieren una "descentralización" de la Iglesia se encontrarían con que un cambio en la forma de entender las Conferencias Episcopales sería contraproducente. "Cada obispo tiene comunicación directa e inmediata con el Papa", afirmó el prelado. "No podemos tener una descentralización en las Conferencias, porque habría el peligro de un nuevo centralismo, en el cual el presidente tiene toda la información y los Obispos están sumergidos en documentos".
Los lefebvristas están alejados de la Iglesia por al cisma
Sobre el estado actual de los lefebvristas, luego de que en reiteradas ocasiones rechazaran la apertura del Papa Benedicto XVI para recibirlos nuevamente en el seno de la Iglesia Católica, el prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe señaló que debido al cisma en el que han incurrido los seguidores del fallecido arzobispo francés Marcel Lefebvre, los lefebvristas se han alejado de la Iglesia.
El Prelado explicó que “a los obispos (los cuatro ordenados por Lefebvre, quien falleció excomulgado) se les levantó la excomunión canónica por las ordenaciones ilícitas, pero queda la sacramental, de facto, por el cisma: se han alejado de la comunión con la Iglesia”.
“Luego de eso, no cerramos nunca la puerta y los invitamos a reconciliarse. Pero ellos deben cambiar su actitud, aceptar las condiciones de la Iglesia Católica y al Sumo Pontífice como criterio definitivo de pertenencia”, agregó.
Por último, en relación a la afirmación del Papa sobre que la Iglesia no es una “aduana”, el Prefecto indicó que eso “es cierto, ¡tampoco lo es la Congregación para la Doctrina de la Fe. El Papa tiene el carisma de expresarse no solo con conceptos teológicos sino a través de imágenes cercanas al corazón de la gente que muestran la cercanía de Jesús con todos nosotros”.
“Los teólogos corremos el riesgo siempre de cerrarnos en el mundo de la reflexión académica. Pero Francisco no va a otra parte: combina la ternura del pastor y la ortodoxia, que no es una ortodoxia cualquiera, sino la recta doctrina expresada en la plenitud de la Revelación. El primer custodio de la fe es Pedro y su sucesor como Obispo de Roma”.+
Publicar un comentario