Cuatro claves del primer año del pontificado de Francisco, según monseñor Ojea
San Isidro (Buenos Aires) (AICA): El obispo de San Isidro, monseñor Oscar Ojea, resumió en cuatro puntos centrales el primer año del pontificado del papa Francisco: la insistencia en la cultura del encuentro, una Iglesia de puertas abiertas y misionera, una Iglesia misericordiosa es una Iglesia que se abre a la pobreza del hombre, y una clara opción por los hermanos más pobres. “Este año bendito diría yo, providencial para la Iglesia, que ha estado marcado por estos temas, que yo los he dicho, los he expuesto de un modo un poco deshilachado, han tenido una predicación apoyada en gestos concretos”, aseguró, y citó algunos: “El Papa que lava los pies el jueves santo en un lugar que nosotros podríamos decir un lugar de sufrimiento. El Papa que continuamente besa y acaricia a nuestros niños. El Papa que habla por teléfono. El Papa que responde cartas. El Papa que quiere estar presente en toda situación, especialmente donde hay dolor”, subrayó.
“El segundo punto en el que ha insistido muchísimo el Papa es en una Iglesia de puertas abiertas, una iglesia misionera, una Iglesia que no misione de cualquier modo sino que no pierda la alegría de vivir el mensaje evangélico de ser evangelizada ella misma y de transmitir esa alegría a los demás”, agregó.
El obispo consideró que el tercer punto es “la insistencia en la misericordia de Dios. Una Iglesia misericordiosa es una Iglesia que se abre a la pobreza del hombre. Una iglesia que quiere estar cerca de las heridas y de las lastimaduras de nuestros hermanos. Una iglesia que quiere recibir a todos y especialmente a aquellos que se encuentran con mayores dificultades”.
Monseñor Ojea puso en cuarto lugar “una clara opción por los hermanos más pobres”, que graficó con aquella frase “cómo quisiera una Iglesia pobre para los pobres”.
“Este año bendito diría yo, providencial para la Iglesia, que ha estado marcado por estos temas, que yo los he dicho, los he expuesto de un modo un poco deshilachado, han tenido una predicación apoyada en gestos concretos”, aseguró, y citó algunos: “El Papa que lava los pies el jueves santo en un lugar que nosotros podríamos decir un lugar de sufrimiento. El Papa que continuamente besa y acaricia a nuestros niños. El Papa que habla por teléfono. El Papa que responde cartas. El Papa que quiere estar presente en toda situación, especialmente donde hay dolor”.
Asimismo, valoró que “haya sido un referente en este año también para muchos hermanos nuestros no católicos, hermanos que compartimos la misma fe en Cristo, hermanos que adoramos al mismo Dios, como los hermanos judíos, o como los hermanos musulmanes. Ha tenido muchísimos encuentros con ellos, ha trabajado por la unidad de la iglesia, ha trabajado por el ecumenismo. También con los hermanos de oriente y ha sido un referente muy grande para la paz del mundo”.
“Una persona que la necesitamos y que después de este año le pedimos al Señor que le de mucha salud y mucha fuerza para poder estar con nosotros presidiendo como pastor a la iglesia de Jesucristo y trabajando por cada uno de los hermanos, especialmente por los más pobres.
Que Dios te bendiga Papa Francisco, rezamos por vos como nos pedís en cada carta, en cada mensaje y nos comprometemos a buscar una entrega más radical a Jesús en la alegría del Evangelio”, concluyó.+
Publicar un comentario