Ante la presencia del intendente Julio Garro y autoridades municipales, provinciales y laicos, monseñor Fernández invitó a desarrollar el “sentimiento comunitario que nos ayuda a reconocernos parte de ese entramado comunitario que es la ciudad. Esto implica crecer en el reconocimiento de los otros y en el deseo de caminar con ellos”.
El arzobispo propuso proyectar una ciudad integradora donde no haya barrios de “segunda categoría, ni personas con menos derechos que otros”. “Es verdad que cada uno tiene que esforzarse para su propio desarrollo, pero esto supone, como punto de partida, que haya iguales oportunidades para todos y que a nadie se le nieguen sus derechos fundamentales”, subrayó.
En tanto, monseñor Fernández pidió a Dios que conceda a todos los platenses “el gozo de ser ciudadanos y las ganas de empujar juntos para el desarrollo de la ciudad”.+
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