Mons. Urbanc culminó en Valle Viejo la sexta y última visita pastoral
Valle Viejo (Catamarca) (AICA): El obispo de Catamarca, monseñor Luis Urbanc, culminó este fin de semana la sexta visita pastoral en lo que va del año, que durante diez días lo llevó por las diversas comunidades de la parroquia San Isidro Labrador. Recorrió unas 13 localidades de la jurisdicción parroquial, llegando a instituciones públicas y privadas, deportivas, fuerzas de seguridad, centros de salud, emprendimientos productivos, escuelas estatales y confesionales.
El pastor diocesano recorrió unas 13 localidades de la jurisdicción parroquial, llegando a instituciones públicas y privadas, deportivas, fuerzas de seguridad, centros de salud, emprendimientos productivos, escuelas estatales y confesionales, radios locales; mantuvo reuniones con grupos eclesiales; visitó ancianos y enfermos en sus domicilios particulares; administró los sacramentos y llevó el consejo a cientos de fieles, entre otras actividades que realizó.
El último día de su tarea misionera en tierras chacareras se centró en un encuentro con los jóvenes, en este año particular en que la Iglesia catamarqueña orientó su opción pastoral a este sector. El último día, el sábado 28 de septiembre, decenas de jóvenes se dieron cita en las instalaciones del colegio Nuestra Señora de Guadalupe para compartir una jornada de cercanía con el obispo, que contó con momentos de animación, oración trabajos grupales. Reflexionaron sobre su vida de fe y realizaron preguntas sobre este aspecto.
La culminación de esta acción pastoral en la jurisdicción parroquial se concretó con la celebración de la misa, presidida por el obispo diocesano, monseñor Luis Urbanc, quien concelebró con el párroco, presbítero Julio Ávalos, y el vicario, presbítero Carlos Robledo.
En su homilía, monseñor Urbanc exhortó a los jóvenes a “conquistar la vida eterna luchando por ser justos, honestos, solidarios”, y a no quedarse dormidos. “Cada uno de nosotros se vencerá a sí mismo si persevera en la vida de la fe. La fe no se vive sólo en el templo sino afuera, en la calle, en la casa. Ahí nos tienen que ver que vivimos esa fe”, enfatizó.
Una gran cantidad de fieles colmó el templo parroquial para compartir la mesa eucarística, en torno a la cual despidieron al obispo, agradeciendo su presencia durante estos días de gracia y encuentro. Antes de finalizar la celebración eucarística, el párroco puso en las manos del pastor diocesano una imagen de San Isidro Labrador, patrono de la parroquia chacarera.+
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