Card. Tagle: El Covid-19 no conoce fronteras, pero tampoco la fe, la esperanza y la caridad
Con la certeza, de que “Cristo ha resucitado verdaderamente”, y de que su luz iluminará “la oscuridad” de la crisis actual, el Cardenal exhorta a los fieles a rezar “por la serenidad para aceptar las cosas que no podemos cambiar, el valor para cambiar las cosas que sí podemos y la sabiduría para conocer la diferencia”. “Oremos”, añadió, “para encontrar el significado más profundo de este desafío que toda la humanidad está enfrentando y que nos llama a la fe y a la resurrección”.
Dirigiéndose a los más frágiles y vulnerables, como “los migrantes y refugiados, los ancianos, los enfermos, los pobres y los desempleados” el cardenal Tagle subraya que “la pandemia hace que su sufrimiento sea aún más profundo”; por ello, es necesario instar “a los gobiernos a que garanticen el acceso a la atención de la salud y la protección social para todos”. Rezamos para que nuestros líderes estén a la altura del desafío de promover la unidad y la responsabilidad compartida en todos nuestros países”.
“La historia del mundo ha llegado “a un punto de inflexión -continúa el mensaje- un punto de inflexión que está lanzando nuestras vidas y nuestras sociedades al caos. Por esta razón, algunos de los líderes políticos y sociales deben poder admitir que se equivocaron cuando no garantizaron condiciones de vida decentes para toda la “familia humana”, “sin excepción”.
El presidente de Cáritas señaló que los lazos de la familia humana, “están emergiendo de una manera “increíble” en este momento, “en medio de fracasos, incertidumbres y sufrimientos”: “los lazos que antes dábamos por sentados o ignorábamos, ahora, viviendo en cuarentena y siendo todos marginados y vulnerables”, nos hacen comprender “de una manera sorprendente que nos necesitamos unos a otros”. En cierto modo, el “miedo al mañana” y el “sufrimiento global” han unido a la humanidad.
Y destacó algunos cambios “impensables” hasta hace tres meses: “la calidad del aire ha mejorado en varios países y las partes beligerantes de algunas naciones han llamado al cese del fuego. Esto nos recuerda que “los problemas humanos aparentemente irresolubles no son eternos y que la muerte no tiene la última palabra cuando se hace espacio para la esperanza”.
La labor de Cáritas en el mundo
Mirando, pues, la labor de Caritas en el mundo, el cardenal reitera que el organismo “está afrontando esta emergencia mundial trabajando en unidad, compartiendo las experiencias realizadas en diversos países y tomando medidas para informar sobre el virus, prevenir su contagio y curar a los enfermos”.
El cardenal Tagle agradece a los trabajadores y voluntarios de Cáritas, que expresan su “inmensa gratitud a todos aquellos que, con confianza, abren sus corazones y se entregan plenamente para llevar las luces del amor y la esperanza a la vida de las personas en este oscuro momento”. “El amor de Cristo nos impulsa. Este amor, visto en los pequeños y grandes gestos de esperanza y solidaridad, nos llama a un nuevo futuro y a un nuevo modo de vivir”, concluyó. +
Publicar un comentario