“Nos sentimos honrados, muy bendecidos por el Señor, y comprometidos a hacer todo lo posible para que este Congreso sea una gracia especial para nuestra Iglesia Diocesana y para cuantos participen como delegados de las demás diócesis del país”, expresó monseñor Bressanelli, refiriéndose a la oportunidad de ser la diócesis anfitriona del primer congreso nacional en la región patagónica.
El obispo convocó a la comunidad a preparar el congreso bajo las orientaciones de la Comisión Episcopal de las Misiones, “asumiendo el desafío de “entrar en Estado de Misión” y disponiéndonos todos a colaborar en lo que se necesite, según lo que cada uno pueda”.
Confiando en la ayuda de María Reina de las Misiones, el Santo Cura Brochero, Santa Teresita del Niño Jesús y San Francisco Javier, pidió crecer en el ardor misionero que estos tiempos nos reclaman, e invitó a los coordinadores de las comisiones pastorales de la diócesis a participar de la primera reunión de la Comisión Coordinadora General del congreso, que se llevó a cabo en la noche de ayer en el salón parroquial de la catedral.
“Todos de alguna manera, estamos convocados a apoyar y a prestar algún servicio y el sostén económico necesario, para que este acontecimiento nacional salga lo mejor posible y sea fructuoso para la diócesis y para toda la Iglesia que peregrina en la Argentina”, manifestó el prelado.
En la reunión se designaron las subcomisiones de trabajo para llevar a cabo el congreso.+
Publicar un comentario