La Iglesia jujeña alerta sobre un falso progresismo donde dar un paso adelante es aceptar la muerte
“Queremos expresar con claridad que Vale Toda Vida , porque todo hombre es digno y la vida humana es inviolable desde el mismo instante de la concepción hasta la muerte natural”, comienza el comunicado, y señala: “No podemos caer en el engaño de pretender que la muerte de algunos sea necesaria para la supervivencia de otros. Debemos salvar siempre toda vida”.
“En este clamor por la vida nos unimos a todos los hermanos y hermanas de distintas confesiones religiosas e instituciones civiles que han expresado lo mismo en distintas instancias”, añaden, afirmando que “no es una convicción que brote sólo de la fe sino de la razón natural, común a todo hombre de corazón sincero”.
En consonancia los obispos argentinos, expresan: “La pregunta humana y ética es: ¿hay que optar por una vida y eliminar a otra?”, y aseguran que “la eliminación de la vida humana del que no se puede defender instaura el principio de que los más débiles pueden ser eliminados; acepta que unos pueden decidir la muerte de otros”.
“Hace unos años con la sanción de la Ley ‘Asignación Universal por Hijo’, el Honorable Congreso de la Nación demostró una vez más en su historia republicana un alto grado de sensibilidad humana a favor de la familia y de la vida de los niños y jóvenes más pobres. ¿No se podrá continuar por ese camino legislativo?”, plantean, citando el documento publicado en febrero de este año por la comisión ejecutiva de la Conferencia Episcopal Argentina.
Finalmente, animan a los legisladores a “buscar soluciones superadoras y a no caer en la trampa de un ‘progresismo’ mal entendido en donde dar un paso adelante sea aceptar la muerte de inocentes e indefensos”, y expresan preocupación ante la situación de muchas mujeres “que ante un embarazo inesperado o imprevisto piensan en una opción que no soluciona su problema”.
“Pedimos perdón porque muchas veces no hemos sabido acompañar estas situaciones tan dramáticas no sólo para las mujeres madres sino también para los varones padres”, reconocen, y se manifiestan desafiados por la realidad que “nos muestra carencias profundas de formación en nuestras comunidades”, haciéndose cargo por “no haber evangelizado suficientemente estos aspectos tan trascendentes de la vida”.
“Queremos como pastores ponernos al lado de los más pobres e indefensos y animarnos a dar pasos decididos para la atención pastoral de niños, adolescentes, jóvenes, adultos y familias que requieren de nuestra ayuda , presencia y compañía”, concluyen, pidiendo a Dios, “por intercesión de nuestra buena Madre de Río Blanco, que ilumine a nuestros legisladores y hacemos votos para que como comunidad ciudadana trabajemos juntos a favor de toda vida, sin eliminar ninguna”.+
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