Al llegar a la catedral, fue recibido por autoridades religiosas, a quienes saludó antes de entrar al templo dedicado a la Transfiguración del Señor, donde también están presentes un grupo de niños con alguna discapacidad, así como los 26 integrantes del reconocido Coro de los Niños Cantores de Morelia.
El Papa depositó un ramo de flores ante la imagen de la Virgen de la Salud y otro ante las reliquias de dos niños, tras lo cual dirigió un breve mensaje a los 600 niños reunidos en la Catedral de Morelia.
“¡Buenas tardes!, dijo el Pontífice, Sé que vienen de todas las parroquias de la ciudad y de las diócesis sufragáneas y de algunos colegios. Muchas gracias por la visita y le voy a pedir a Jesús que los haga crecer con mucho amor, con mucho amor, como tenía él, con mucho amor para ser cristianos en serio, para cumplir el mandamiento que Jesús nos dio: Amar a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como Jesús nos amó, como nosotros mismos y más como El nos amó”.
Francisco invitó a los niños a rezarle a la Virgen pidiéndole “que nos cuide, que nos bendiga. Cada uno de ustedes, pidió el Papa, piense en su corazón en la familia que tienen y en los amigos y si están peleados con alguno también piensen por él”.
Asimismo añadió: También le vamos a pedir que la Virgen los cuide, es una manera de haciéndonos amigos y no tantos enemigos porque la vida no es linda con enemigos y el que hace los verdaderos amigos es Dios en nuestro corazón”.
“Entonces –continuó- en silencio pensamos en la familia, en nuestros amigos, en aquellos con quienes estamos peleados, para que Dios los bendiga y por todas las personas que nos ayudan: las monjas, los curas, los profesores, la escuela, todos los que nos están ayudando a crecer. Una bendición especial también para papá, mamá y los abuelos. Silencio, cerramos los ojos y pedimos todo esto”, y rezó, junto a los niños, un Ave María.
Seguidamente saludó, bendijo y dio palmadas a varios pequeños enfermos, uno de los cuales lo abrazó con gran ternura, tras lo cual caminó por el pasillo central de la iglesia hacia las puertas de la Catedral mientras lo niños no cesaban de gritar su nombre y cantar.
El Papa salió de la catedral de Morelia en compañía del arzobispo de Morelia, cardenal Alberto Suárez Inda, y se detuvo en el atrio para escuchar a la orquesta y el Coro de Niños de ese templo.
Al terminar la canción, se acercó para que le tomaran una fotografía con el coro, a cuyos integrantes les invitó a seguir siendo creativos, a buscar la belleza y “las cosas lindas que duran toda la vida y nunca se dejen pisotear por nadie”.
Enseguida les dio la bendición y les pidió que de vez en cuando le canten alguna “canción, aunque estén lejos”.
Tras abandonar dicho recinto, el Pontífice realizará un recorrido por la capital michoacana a bordo del papamóvil hacia el estadio José María Morelo y Pavón donde mantendrá un encuentro con los jóvenes en el estadio José María Morelos y Pavón. Al término de este acto, regresará a la ciudad de México.
This entry passed through the Full-Text RSS service - if this is your content and you're reading it on someone else's site, please read the FAQ at fivefilters.org/content-only/faq.php#publishers.
Publicar un comentario