Considerando que Europa es la cuna del cristianismo, que en Roma se llevó a cabo el martirio de los príncipes de los apóstoles, Pedro y Pablo, que allí también se comenzó a sembrar, desde los comienzos, la Palabra de Vida y que es en sus naciones donde se generó también una gran cantidad de mártires y santos, el director de las OMP advirtió sobre la necesidad actual de un regreso a las fuentes.
“Hoy Europa está lejos de ser una cultura cristiana”, manifestó, y reconoció que es necesario que sus habitantes descubran que el viejo continente fue la tierra de donde surgieron grandes congregaciones misioneras, que sus religiosos y sacerdotes salieron a la misión por el mundo, y que los patronos de las misiones nacieron en sus ciudades.
“En este tiempo se necesitan misioneros en todas partes”, afirmó, y admitió que el continente europeo los necesita. “Es volver a la creencia inicial. No se puede olvidar fácilmente lo que se sembró con esfuerzo y entrega. Descubrir la belleza y bondad de Dios y la verdad que solo encierra Jesús y su Evangelio que da vida”, agregó y finalizó ofreciendo oración “por los hermanos alejados, para que descubran y vuelvan a la fantástica aventura de vivir las enseñanzas del Señor”. +
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